La Inspiración Poética

in CELF Magazine3 years ago


Fuente

 

Nos encontramos muchas veces, cuando escribimos cualquier trabajo o asignación, ante momentos en que la creatividad o el ingenio no salen a la luz. Especialmente en la creación poética, ese todo inefable, ese instante fugaz que conecta lo consciente con lo inconsciente por medio de la asociación libre de ideas que heredamos de las tradiciones aprendidas del surrealismo, no surge, sino al contrario permanece en un ingente bloqueo.

En lo personal se piensa que es necesario de cualquier modo acudir de nuevo a las fuentes. Nunca olvido aquel fragmento de Octavio Paz el cual dice: “El acto de escribir poemas se ofrece a nuestra mirada como un nudo de fuerzas contrarias, en el que nuestra voz y la otra voz se enlazan y confunden. Las fronteras se vuelven borrosas: nuestro discurrir se transforma insensiblemente en algo que no podemos dominar del todo; y nuestro yo cede el sitio a un pronombre innombrado, que tampoco es enteramente un tú o un él. En esta ambigüedad consiste el misterio de la inspiración. ¿Misterio o problema? Ambas cosas: para los antiguos la inspiración era un misterio; para nosotros, un problema que contradice nuestras concepciones psicológicas y nuestra misma idea del mundo. Pues bien, esta conversión del misterio de la inspiración en problema psicológico es la raíz de nuestra imposibilidad para comprender rectamente en qué consiste la creación poética”. (Mexico, 1956, Editorial Fondo de Cultura Económica).

En todo caso, parafraseando a Picasso, “Espero que la inspiración me encuentre trabajando’’. Más aun por cuanto en los últimos tiempos los descubrimientos, sobre Neurofeedback entre otras teorías, sobre el cerebro han revelado funcionamientos en el mismo que casi pudiera confirmar que el universo pudiera tener una explicación lógica en medio de su grandeza e inconmensurable existencia. Pero no todo está perdido para el misterio. Lo místico todavía aguarda en la última estación de la superautopista de la información. Sobre todo para los que apuestan a que la revelación poética descansa a partir de otras vertientes inexactas: La espiritualidad, la música, el arte en todas sus expresiones, la relación primaria entre la especie humana y su entorno, y el máximo escalafón que es el lenguaje, la primera revolución en si mismo, el motivo de la verdadera “Revolución Humana’’’.

El mismo Octavio Paz tuvo periodos de apertura hacia posibilidades de pensamiento basadas en, por ejemplo, el budismo. Otros prefieren quedarse un poco más cerca con las propuestas imperecederas de un San Juan de la Cruz o Sor Juana Inés de la Cruz. Pero finalmente la certeza continua estacionada entre las nuevas tendencias o costumbres surgidas de estos tiempos en que hemos de permanecer un poco aislados, enfrentados a una realidad aparente, que nos obliga, nos interpela, nos lanza a nuevas búsquedas, que no necesariamente están desvinculadas de nuestra historia. Solamente la razón pudiera esgrimir un poco de cautela ante la costumbre inherente del ser humano en ir a la búsqueda de su verdadero yo interior.

Sort:  

Bellísimo fragmento de Octavio Paz! Gracias por compartir esto. Estaba pensando acerca de la inspiración justo hoy.

Gracias por su comentario amigo. Saludos