Hola amigos de Hive, es un honor para mí saludarles nuevamente.
He estado ausente de la plataforma por motivos referentes a la carrera que ejerzo, la medicina, pues como he explicado antes estoy en un post grado, que consume gran parte de mi tiempo.
Sin embargo, por acá estoy, tomando un descanso y volviendo para compartir con este ecosistema que tanto extrañe, deseando para ustedes cómo siempre bendiciones de Dios, traducidas en salud, amor, y prosperidad.
En mi post de hoy les comparto una situación vivida hace tan solo 2 días, en un pueblo cercano a dónde resido, antes debo mencionar que en mi país, Venezuela, actualmente estamos en época de invierno, y las lluvias han sido constantes.
Venezuela rara vez vez, es afectada por catástrofes naturales, de hecho se puede contar con los dedos de una mano este tipo situaciones, y es mucho menos común en la zona donde vivo (San Juan de los Morros, Estado Guárico), dónde hay cantidades de cerros, lomas y morros, que además de brindar una vista maravillosa, protegen a la ciuda y sus alrededores de ciclones y ventarrones.
No obstante nunca estamos excelsos a pasar por situaciones complicadas, cómo nos enseñó la naturaleza en esta ocasión.
Les cuento, Parapara es un pueblito a tan solo 10 minutos de donde vivo, su población es de aproximadamente 1.300 habitantes, sus casas se caracterizan por ser humildes y sencillas, y la gente que allí habita tienen un corazón bonito, noble y desprendido.
Entre sus labores, aún encontramos la casa y la pesca (cómo en la época colonial), pero destacan sobre toda las cosas la agricultura, y cría de cerdos, chivos y ovejas.
Este humilde pueblo al cual hago referencia, sufrió una inundación a grandes escalas, dejando perdidas humanas, animales, materiales y económicas irreparables.
No podemos olvidar que mi país, Venezuela, sufre aún una crisis política, económica,social y sanitaria, que aunque se ha aligerado los últimos meses, no deja de afectar a toda la población.
Rápidamente, la noticia de la catástrofe ocurrida en Parapara, recorrió todo el estado, al llegar a mis oídos me ofrecí como voluntario para prestar mis servicios en dicha zona y es que la inundaciones, traen consigo la proliferación de enfermedades, cómo el catarro común, diarreas, vómitos, síndrome febriles, dengue, deshidratación, inclusive tétanos si no se está vacunado.
Es importante mencionar, que las zonas recorridas son de difícil acceso, y el tránsito de vehículos por las lluvias es imposible, ya que en la zona abunda barro y bosque, pero tenía un equipo decidido a desplegarse para brindar atención, medicamentos y algunas barras energéticas, además de agua potable.
Después de horas de caminar y caminar, pudimos constatar con ojos propios lo que se venga comentando, y si, la inundación destruyó hogares enteros, dejando a su paso un ambiente desolador.
Las víctimas nos comentaban cómo tuvieron que dormír en árboles pues los ríos se habían desbordado inclusive tapando sus casas, y destruyendo todo a su paso.
Poco a poco fuimos, atendiendo a la población inmunizando y brindando apoyo tanto físico como psicológico a los afectados, por mi parte comprendo que no es fácil ver como por lo que tanto trabajamos podemos perderlo en un instante.
Me contuve de tomar algunas fotos, pues creo que no era el momento preciso, para fotografiar a los afectados mientras le entregábamos algunos insumos.
Soy fiel creyentes que la solidaridad debe aplicarse desde todos los ámbitos, y respetar el dolor ajeno es necesario para la sanación.
Sin duda alguna, iré las veces que sean necesarias a colaborar con los damnificados de esta o cualquier región de mi país, a poner mis servicios a la orden, pues para mí de eso se trata la vida.
Las donaciones de parte de las zonas aledañas han sido pocas pero de corazón, si tomamos en cuenta la situación que atravesamos, estoy seguro que todo mejorará, con Dios de la mano.
Gracias.
Dios siempre de Cabrestero.
PD: Fotos de mi propiedad y vídeos de mi propiedad.
English:
Hello friends of Hive, it is an honor for me to greet you again.
I have been absent from the platform for reasons related to the career I pursue, medicine, because as I have explained before, I am in a postgraduate course, which consumes a large part of my time.
However, here I am, taking a break and coming back to share with this ecosystem that I miss so much, wishing for you as always blessings from God, translated into health, love, and prosperity.
In my post today I share with you a situation I experienced just 2 days ago, in a town near where I live, before I must mention that in my country, Venezuela, we are currently in winter, and the rains have been constant.
Venezuela is rarely affected by natural disasters, in fact you can count this type of situation on the fingers of one hand, and it is much less common in the area where I live (San Juan de los Morros, Guárico State), where there are quantities of hills, hills and hills, which in addition to providing a wonderful view, protect the city and its surroundings from cyclones and gales.
However, we are never exalted to go through complicated situations, as nature taught us on this occasion.
I tell you, Parapara is a small town just 10 minutes from where I live, its population is approximately 1,300 inhabitants, its houses are characterized by being humble and simple, and the people who live there have a beautiful, noble and generous heart.
Among their tasks, we still find the house and fishing (as in colonial times), but agriculture and raising pigs, goats and sheep stand out above all else.
This humble town to which I refer, suffered a large-scale flood, leaving irreparable human, animal, material and economic losses.
We cannot forget that my country, Venezuela, is still suffering from a political, economic, social and health crisis, which, although it has eased in recent months, continues to affect the entire population.
Quickly, the news of the catastrophe that occurred in Parapara, traveled throughout the state, when it reached my ears I volunteered to provide my services in that area and that is because the floods bring with them the proliferation of diseases, such as the common cold, diarrhea, vomiting, febrile syndrome, dengue, dehydration, including tetanus if not vaccinated.
It is important to mention that the areas covered are difficult to access, and the traffic of vehicles due to the rains is impossible, since the area abounds with mud and forest, but he had a team determined to deploy to provide care, medicines and some energy bars. , in addition to drinking water.
After hours of walking and walking, we were able to verify with our own eyes what is being commented, and yes, the flood destroyed entire homes, leaving in its wake a desolate environment.
The victims told us how they had to sleep in trees because the rivers had overflowed, even covering their houses, and destroying everything in their path.
Little by little we went, attending to the population by immunizing and providing both physical and psychological support to those affected, for my part I understand that it is not easy to see how we can lose it in an instant because of what we work so hard for.
I refrained from taking some photos, because I think it was not the right time, to photograph those affected while we delivered some supplies.
I am faithful believers that solidarity must be applied from all areas, and respecting the pain of others is necessary for healing.
Without a doubt, I will go as many times as necessary to collaborate with the victims of this or any region of my country, to put my services to order, because for me that is what life is all about.
The donations from the surrounding areas have been few but from the heart, if we take into account the situation we are going through, I am sure that everything will improve, with God by the hand.
Thanks.
God always Cabrestero.
PS: Photos of my property and videos of my property.
Su post ha sido valorado por @ramonycajal
Hola @arturocajoti86 sinceramente me sorprende mucho que esto haya ocurrido por San Juan de los Morros, tal como dices no es una zona en donde esto sea recurrente, claro está, con todo esto del calentamiento global y el desequilibrio medioambiental que tenemos, nada está a salvo.
Lamento mucho la situación y admiro tu disposición para acudir y ayudar a los afectados, es una acción necesaria y conociendo las deficiencias del sector sanitario (a nivel de insumo y tecnología) es admirable que con tan poco puedan los médicos hacer tanto.
Venezuela ya sin este tipo de desastres está muy necesitada, y me rompe el corazón saber que además de ello hay personas pasando momentos tan malos por situaciones que se escapan de nuestras manos.
Mucho ánimo y siéntete orgulloso porque estas realizando una labor no solo noble sino más que apropiada!