Ya era de noche y el duendecillo tenía horas caminando perdido. No había nadie a quién pudiera preguntar cómo encontrar algún camino que lo llevara a algún lugar donde poder descansar. El cielo parecía estar al tanto de la tristeza que caminaba con él. Hasta que coincidió con una luciérnaga.
-¿A dónde vas? Pareces perdido. – Pregunta la luciérnaga al ver que se acercaba.
-De donde vengo, me dijeron que ya tenía la edad para salir a buscar mi propio tesoro, no puedo regresar hasta encontrarlo. Pero no sé muy bien que busco, ni a donde voy. Solo comencé a caminar y ahora me encuentro perdido. – Respondió el duendecillo, mientras se recostaba de un árbol.
-El bosque se encuentra lleno de tesoros, es mágico. Incluso ahí donde estás, puedes estar encima de un tesoro.
-No sé qué forma tienen los tesoros o de qué color puedan ser, solo sé que es algo que debo cuidar. ¿Por qué escondería algo que debo cuidar debajo de la tierra?
-La tierra guarda consigo el secreto de la vida. A ella le debes el árbol donde estás reposando. Como yo lo veo, es todo un tesoro.
-Pero los árboles no tienen brillo, como tú por ejemplo.
-Los árboles me dan oxígeno, lo que me permite obtener luz y poder cumplir con mi función de vida en el bosque.
-¿Tu función?
-Sí, todos tenemos una función importante para el ecosistema, él nos da la vida y nosotros vivimos para conservarlo. Por eso siempre he sabido cuál es mi tesoro. Quizás si piensas en lo que te gusta hacer puedas encontrar respuestas.
-No es mucho lo que puedo decir que me gusta, de donde vengo el único propósito de vida con el que he crecido es el de prepararme para buscar mi propio tesoro, tampoco es mucho lo que se hacer. Me gusta pintar. Es algo que nadie sabe, pero hace tiempo, mientras salía a buscar comida, me encontré un montón de pinturas y diferentes tipos de pínceles. Al parecer alguien la había extraviado desde hace mucho, así que decidí buscar el dueño para regresarlas. Pasó el tiempo y nadie vino a reclamar por ellas. Hasta que un día, mientras veía que el sol estaba saliendo, comencé a pincelar de la nada. Desde entonces me gusta despertar temprano y desde mi balcón poder pintar libremente los colores del cielo. Entonces, quise más pinturas y trabajaba tiempo extra para comprar sin decirle a nadie. Mi familia nunca ha entendido la pintura y el único brillo que les parece atractivo es el brillo del oro. Es mi pequeño secreto.
-¿Entonces cuidas muy bien de tus pinturas?
-Sí, las clasifico por escala de colores. Entre colores fríos y colores cálidos. Ojalá pudiera mostrarte todo lo lindo que puedo pintar porque es algo que me hace feliz. Desearía encontrar mi tesoro rápido. Extraño tanto pintar desde mi balcón.
-El bosque está lleno de colores, puedes pintar desde cualquier lugar sin ocultar tus pinturas de nadie.
-Me da miedo perderlas. Siempre he pensado como se habrá sentido la persona que extravió todas esas pinturas en aquel momento. De haber sido mías me sentiría muy triste.
-¿Entonces las cuidas como si fueran un gran tesoro?
En ese momento el duendecillo se dio cuenta que había encontrado su tesoro desde hace mucho tiempo. Tantos días caminando sin saber a dónde iba y la respuesta siempre estuvo en casa. Encontró en la pintura una versión de él mismo que lo hacía sentirse diferente del resto, pero a su vez se sentía satisfecho. Supo en ese momento que no tenía que sentir miedo y que debía regresar para contarle a todos cuál era su gran tesoro sin importar lo que pudieran decirle. Se sintió libre.
-Debo regresar y seguir cuidando mi tesoro. Estoy muy lejos de casa, pero ¿te gustaría acompañarme de regreso y ver lo lindo que es pintar? – Pregunta el duendecillo mientras sus ojos brillaban de entusiasmo.
-Te ayudaré a encontrar el camino de regreso. Mi lugar está en el bosque, las luciérnagas existimos para avisar que el bosque está libre de contaminación y somos pocas las que quedamos. Además me perdería entre las luces que están fuera del bosque. Pero en cambio, ahora que encontraste tu gran tesoro, no lo ocultes, te invito a salir de tu balcón y conocer los colores que te ofrece lo que se encuentra afuera. Entonces quizás algún día podamos coincidir nuevamente.
La luciérnaga ayudó al duendecillo a salir del bosque, se despidieron y el duendecillo se prometió así mismo ya no sentir miedo por sentirse diferente, de ahora en adelante seguiría su propio camino y saldría a conocer el mundo y encontrar muchos amigos con los que pudiera compartir su gran tesoro. Parece ser el final de este cuento, pero también el comienzo de muchas aventuras para el pequeño duendecillo.
fin
The goblin and the firefly
It was already night and the pixie had hours walking lost. There was no one to whom he could ask how to find some way that would lead him somewhere where he could rest. Heaven seemed to be aware of the sadness that walked with him. Until he met a firefly.
-Where are you going? You seem lost. - Asked the firefly when it saw it approaching.
-Where I come from, they told me I was old enough to go looking for my own treasure, I can't go back until I find it. But I don't really know what I'm looking for, or where I'm going. I just started walking and now I find myself lost. - The pixie answered, as he leaned back from a tree.
-The forest is full of treasures, it is magical. Even where you are, you can be on top of a treasure.
-I don't know what shape the treasures are or what color they may be, I just know that it is something I must take care of. Why would I hide something that I must take care of under the ground?
-The earth keeps with it the secret of life. You owe her the tree where you are resting. As I see it, it is quite a treasure.
-But the trees have no brightness, like you for example.
-The trees give me oxygen, which allows me to obtain light and to fulfill my function of life in the forest.
-Your role?
-Yes, we all have an important function for the ecosystem, it gives us life and we live to conserve it. That is why I have always known what my treasure is. Maybe if you think about what you like to do you can find answers.
-There is not much I can say that I like it, where I come from the only purpose in life with which I have grown up is to prepare myself to search my own treasure, there is not much to do either. I like painting. It's something no one knows, but a long time ago, while out looking for food, I came across a lot of paintings and different types of paintbrushes. Apparently someone had lost it for a long time, so I decided to find the owner to return them. Time passed and no one came to claim for them. Until one day, while I saw that the sun was rising, I began to paint out of nowhere. Since then I like to wake up early and from my balcony to be able to freely paint the colors of the sky. So, I wanted more paintings and worked overtime to buy without telling anyone. My family has never understood paint and the only glitter they find attractive is the glitter of gold. It's my little secret.
-So you take good care of your paintings?
-Yes, I classify them by color scale. Between cold colors and warm colors. I wish I could show you how beautiful I can paint because it is something that makes me happy. I wish I found my treasure quickly. I so miss painting from my balcony.
-The forest is full of colors, you can paint from anywhere without hiding your paintings from anyone.
-I'm afraid of losing them. I have always thought how the person who lost all those paintings must have felt at that time. If they had been mine, I would feel very sad.
-So you take care of them as if they were a great treasure?
At that moment the pixie realized that he had found his treasure a long time ago. So many days walking without knowing where I was going and the answer was always at home. He found in the painting a version of himself that made him feel different from the rest, but at the same time he felt satisfied. He knew in that moment that he did not have to be afraid and that he should go back to tell everyone about his great treasure no matter what they might tell him. The pixie felt free.
-I must return and continue taking care of my treasure. I'm a long way from home, but would you like to come back with me and see how beautiful painting is? - Asks the pixie while his eyes shone with enthusiasm.
-I'll help you find your way back. My place is in the forest, the fireflies exist to warn that the forest is free of contamination and there are few of us left. Besides, I would get lost in the lights outside the forest. But instead, now that you have found your great treasure, do not hide it, I invite you to come out of your balcony and know the colors that what is outside offers you. Then maybe one day we can meet again.
The firefly helped the pixie out of the forest, they said goodbye and the pixie promised himself that he would no longer be afraid of feeling different, from now on he would follow his own path and would go out to know the world and find many friends with whom he could share his great treasure. It seems to be the end of this tale, but also the beginning of many adventures for the little pixie.
End.
(Ilustraciones de David Pabon)
genial que hermoso así es cada uno brilla a su manera y bienvenida a esta aventura de escritura y creatividad.saludo...
Gracias por apreciar la lectura 😄
de hecho yo tambien escribo ,me gusta saludos.
Vale, te sigo. :)
Congratulations @vivitinerante! You have completed the following achievement on the Hive blockchain and have been rewarded with new badge(s) :
You can view your badges on your board And compare to others on the Ranking
If you no longer want to receive notifications, reply to this comment with the word
STOP