De vez en cuando es totalmente necesario desconectar y escapar de esa rutina diaria que hace que la vida se te pase sin darte cuenta. Momentos de desconexión que te hacen ver las cosas desde otra perspectiva y que te ayudan a no perder esa ilusión por seguir peleando día a día.
Salir de comida con tu mujer, pasear por la ciudad, todo sin ningún tipo de prisa y sin ningún límite de horas, sin tener que recoger a tus hijas de ningún sitio, sin tener que pensar si vas a llegar a tiempo a la reunión... ir a tomarte un café con toda la tranquilidad del mundo...
Totalmente necesario, casi obligatorio para poder seguir adelante y no perder la ilusión por nada.
Día de desconexión, comida, café y unos cruasanes para terminar la tarde del mejor modo posible.
Un café, una merienda, una conversación social, juntarse con amigos, salir con la familia, detenerse a observar algún paisaje o simplemente el echo de escapar de la rutina nos da un respiro, sacar de la cabeza todas esas ideas, obligaciones y preocupaciones que nos enfrentamos a diario.
Darle un respiro al alma hace mucho peso en nuestra salud física y mental, como dices, siempre es necesario hacerlo. Por cierto excelentes fotos, ¡Saludos!.
Muy necesario. Muchas gracias y un saludo :)