La mayor parte de mi vida la dediqué a la docencia en condición de empleado. En mi actividad me sentía bastante bien y aunque los ingresos no eran muy holgados no me interesaba buscar algo más allá de las aulas. Mi mundo era ese, estar con los jóvenes en su proceso de formación como personas.
Pero al correr del tiempo apareció en el panorama la cercanía de la jubilación y ahí si comencé a pensar en otros proyectos, en qué hacer una vez que dejara de dar clases. Tenía a mi favor la gran ventaja de que me jubilaría relativamente joven, mucho antes de los cincuenta. En esa edad todavía tendría la energía necesaria para emprender algún negocio que me llamara la atención.
Mientras más se acercaba la fecha más ideas se me iban ocurriendo. Todas las compartía con mi esposa, quien ha sido mi compañera de andanzas. Cada idea que se nos ocurría la evaluábamos minuciosamente, buscando los pro, los contras, la factibilidad, y lo más importante, si nos íbamos a sentir bien los dos con ese proyecto.
Luego de infinitas conversaciones, en las que descartamos un sinfín de buenas ideas, ambos coincidimos en que nos gustaría pasar ese tiempo post jubilación en un negocio cerca del mar, a mi esposa le pareció excelente que montáramos una posada.
A mí la idea de la posada me llamaba mucho la atención. Siempre me ha parecido que atender a viajeros debe ser una gran experiencia. Además de conocer gentes diferentes, cosa que me parece muy interesante, uno puede contribuir a que la pasen bien. Pienso que eso de la posada debe ser una gran actividad.
Con la idea en mente lo siguiente fue seleccionar en qué sitio nos gustaría estar. Eso para nosotros no era tan difícil porque hemos tenido la fortuna de conocer toda la costa de nuestro país.
Mi primera sugerencia fue Paraguaná, lo que a mi esposa le pareció una auténtica locura. Aparte de lo lejos, la otra pega que le puso era la soledad. Según su apreciación por allá no tendríamos casi posibilidades de salir adelante. Además, estaba un factor muy importante no conocíamos a nadie en la zona, por lo que probablemente nos costaría más resolver los problemas que implican un negocio de este tipo.
Luego de pensarlo mejor decidimos que el sitio adecuado era la costa aragüeña, específicamente hacia los lados de Ocumare de la costa. Esa locación queda muy cerca de nuestra casa en Maracay por lo que en temporada baja podríamos venir a pasar unos días en el hogar de siempre. Otro gran punto a favor de ese sitio era la facilidad de trasladar desde Maracay cualquier conocido que necesitáramos para resolver algún problema de infraestructura, tales como electricidad, tuberías, albañilería, aire acondicionado y otros.
Para el año dos mil dos introduje mi solicitud de jubilación, con el monto que recibiría por mis prestaciones sociales más algunos ahorros sería suficiente para comprar una pequeña casa en Ocumare y de ese modo arrancar el negocio. Exploramos el mercado y había opciones suficientes. Ahora todo dependía del tiempo en que me dieran el dinero.
La liquidación tardó más de lo que habíamos estimado. Sin embargo, cuando me dieron la primera parte, a comienzos de dos mil siete, todavía ese dinero alcanzaba para dar una inicial y de hecho logramos pactar con un señor de Ocumare la compra de su casa, que era ideal para nuestro propósito.
Pero cuando me dieron la segunda parte, casi un año después, las condiciones económicas habían cambiado. La devaluación y la inflación comenzaron a trastocar todos los precios. El dueño de la casa mantenía su intención de venta pero hizo un ajuste en el precio mucho mayor de lo que disponíamos. El negocio de la posada quedó en stand by esperando una mejor oportunidad que hasta ahora no ha llegado. Puede ser que más adelante…
Esa es mi entrada para la iniciativa propuesta por la comunidad de Be Entrepreneur. Para darle continuidad invito a las amigas @mafalda2018 y @sacra97.
Gracias por tu tiempo.
I spent most of my life as a teacher, so I was always an employee. In my activity I felt quite good and although the income was not very comfortable, I was not interested in looking for something beyond the classroom. That was my world, to be with young people in their process of formation as persons.
But as time went by, retirement approached and I began to think about other projects, about what to do once I stopped teaching. I had in my favor the great advantage that I would retire relatively young, well before fifty. At that age I would still have the energy to take on some business that caught my attention.
The closer I got to the date, the more ideas came to mind. I shared them all with my wife, who has been my partner in crime. Each idea we came up with was carefully evaluated, looking for the pros, cons, feasibility, and most importantly, if we were going to feel good about the project.
After endless conversations, in which we discarded countless good ideas, we both agreed that we would like to spend that post-retirement time in a business near the sea, my wife thought it was excellent that we set up an inn.
The idea of the inn really appealed to me. It has always seemed to me that attending to travelers must be a great experience. In addition to meeting different people, which I find very interesting, you can contribute to their having a good time. I think that the inn should be a great activity.
With the idea in mind, the next thing to do was to select where we would like to be. That was not so difficult for us because we have been fortunate to know the whole coast of our country.
My first suggestion was Paraguaná, which my wife thought was really crazy. Apart from the distance, the other drawback was the loneliness. According to her, we would have almost no chance of getting ahead there. Besides, there was a very important factor: we did not know anyone in the area, so it would probably be more difficult for us to solve the problems involved in a business of this type.
After thinking it over we decided that the right place was the coast of Aragüe, specifically towards Ocumare de la Costa. That location is very close to our house in Maracay so in low season we could come and spend a few days in our house. Another great point in favor of that site was the ease of transferring from Maracay any acquaintance that was to solve us any infrastructure problem, such as electricity, plumbing, masonry, air conditioning and others.
For the year two thousand and two I introduced my retirement application, with the amount I would receive for my social benefits plus some savings would be enough to buy a small house in Ocumare and thus start the business. We explored the market and there were enough options. Now everything depended on the time in which they would give me the money.
The settlement took longer than we had estimated. However, when they gave me the first part, at the beginning of two thousand seven, that money was still enough to make a down payment and in fact we were able to make an agreement with a man from Ocumare to buy his house, which was ideal for our purpose.
But when I got the second part, almost a year later, the economic conditions had changed. The devaluation and inflation began to upset all prices. The owner of the house maintained his intention to sell but made a much larger price adjustment than we had available. The business of the inn was put on hold waiting for a better opportunity that so far has not come. Maybe down the road...
That's my entry for the initiative proposed by the Be Entrepreneur community. To give it continuity I invite friends @mafalda2018 and @sacra97.
Thanks for your time.
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Bueno si no se puede pues no se puede... toca virar a lo que si se puede... Las oportunidades siempre las hay, especialmente en un país con tantas necesidades. Desafortunadamente las condiciones son muy complicadas, pero eso es lo que le da el picantico... jejeje
(aunque a mucho picante cae mal...)
Sí, hay quienes tienen más ojos para las oportunidades. Habrá otras cosas en el camino. Muchas gracias por pasar y comentar. Que estés bien, querido @ibrahimc. Un fuerte abrazo desde Maracay.
Saludos @irvinc, oye me pareció genial esa idea de negocio.
Y coye sí, es un reto diario buscar la manera que la inflación no se coma nuestras ideas y proyectos. Parece mentira pero muchas veces necesitamos 2 o hasta 3 ingresos económicos para poder estabilizar muchas cosas.
Actualmente tengo 3 trabajos por decirlo así:
mi emprendimniento (2 años), por las tardes me voy a la Mansión de Luis (empleado en las delicias maracay) y claro emprendiendo con #hive.
Gracias por compartir su experiencia, me alegra muchísimo saber que hay personas emprendedoras dando el todo por el todo y atreviéndose; como dirían por allí: sin miedo al exito. Hasta pronto.
Así es mi estimado @gilfrenpg. En nuestra situación económica muchos tienen que hacer como tú y buscar varias alternativas. Muchas gracias por pasar y comentar. Que estés bien. Un fuerte abrazo.
Sin duda alguna muchos planes se nos cayeron, ideas buenas que iban y venian. Aquí estamos haciendo algo que nos gusta pero nuestras inquietas mentes nos permiten soñar y retomar otros proyectos pensados.
Maravilloso aporte es lo que hace falta a nuestro país pensar en el turismo interno.
Muchísimas gracias por la amable invitación @irvinc un abrazote.
Como dices mi querida @sacra97, muchos planes se cayeron. Lo del turismo también se ha visto afectado, esperemos que en algún momento las cosas vuelvan a estar bien. Gracias por pasar y comentar. Que estés bien. Un fuerte abrazo desde Maracay.
Hola @irvinc un proyecto hermoso que nos creaba grandes ilusiones, no sé si con posada o no, pero sigo soñando vivir cerca del mar, deberíamos replanteárnoslo. 🙂
Sí vivir cerca del mar sigue siendo un gran sueño. Muchas gracias por pasar y comentar. Que estés bien estimada @damarysvibra. Un fuerte abrazo.
Comprense una grande para que me adopten. Mi combo es de 4...
Ja,ja,ja. con gusto los alojaremos😊
Conozco emprendedores de posadas pequeñas que han estado pasando trabajo y solo el amor por lo que hacen, reinventándose y haciendo alianzas los mantienen aún activos. Gracias por compartir esta bonita idea, deseo lo puedan hacer realidad. 😊
Eso que dices es muy cierto. Tengo amigos en Choroní que la están pasando muy mal. La actividad ha caído principalmente por la dificultad con los medios de pago, solo pueden aceptar efectivo, no funcionan bien las líneas telefónicas ni el internet. Eso ahuyenta a la gente. Muchas gracias por pasar y cometar. Que estés bien estimada @marielarc07. Un fuerte abrazo desde Maracay.
Nice one submission . It is always good that when you want to start a business, It should be something you have passion for.
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