Ese día lunes, autoridades civiles y militares dieron pie a un operativo que inicio con el cierre de institutos educativos, centros comerciales, restaurantes y lugares de concentración pública, luego de que se anunciara la presencia de 17 personas contagiadas, informando así sobre la llegada del coronavirus a nuestro país y la necesidad de mantenernos en casa para nuestro resguardo.
Desde entonces hemos estado inmersos en un contexto que no tenía precedentes en nuestro país, la cuarentena y el miedo de contagio nos ha hecho cambiar drásticamente nuestro día a día y nuestras costumbres; hemos tenido que cambiar besos y apretones de mano por golpes de codo, y algunas otras formas de saludar, en algunas establecimientos nos reciben rociando desinfectante en las manos, sin mencionar que para salir de comprar debes ir disfrazado con el tapa bocas; ya circulan curiosos modelos en las calles, he visto desde los estampados con la nariz de un oso hasta alguno con la dentadura de vampiro, por lo que a veces se siente más Halloween que cuarentena.
Nuestro patrón de consumo también ha cambiado, en nuestro país, aunado a la escasez de gasolina, nos hace ir a los pequeños abastos y mercados cercanos a nuestros hogares y evitar movernos a las grandes cadenas de supermercados, donde también se aglomera el mayor número de personas.
El mayor impacto creo que lo han sufrido nuestros niños, tenerlos todo el dé en casa nos ha dado la oportunidad de estrechar más nuestros lazos con ellos, hablo por los que pasábamos muchas horas del día trabajando fuera de casa, pero también ha resultado estresante para ellos y nosotros este mes sin escuela y sin parques, es decir, sin la interacción con otros niños de su edad, y con papá y mamá tomando el control de su educación, suerte que los maestros, a los que felicito por su labor diaria, nos envían las actividades por correo o por whatsapp, y ellos son muy creativos.
Pero no todo ha sido malo. Como les comenté, nos ha dado la oportunidad de estrechar lazos, antes rogaba por unas merecidas vacaciones, y aunque no podemos salir de casa, el tiempo de descanso me ha sentado bien, así también me ha permitido ocuparme de algunas reparaciones pendientes.
Hasta ahora vamos bien. Pero, ¿cuánto más va a durar? Ya en nuestro país se ha decretado la extensión de la cuarentena por otros 30 días, pero no podemos predecir que sólo será por ese tiempo, quizás vendrán más alargues, solo las condiciones lo determinaran. Y mientras tanto, este encierro prolongado como nos va a afectar, ya nos la ingeniamos para estar encerrados 30 días, pero estábamos medianamente abastecidos, pronto a este enemigo invisible que se ha vuelto el coronavirus se le sumara otro, la disminución del poder adquisitivo para los trabajadores independientes que dependían de la atención al público, hablo desde la realidad de mi país en la que la mayoría dependemos del día a día. Por lo que se avecina una parte inquietante.
Ante el coronavirus, el encierro, el distanciamiento, el aburrimiento y el bombardeo de noticias, sin contar apagones y caída de la conexión a internet; necesitaremos más y mejor comunicación con nuestros familiares, apreciar el hecho de no estar sólo; debemos hacer una rutina en casa o aprovechar el tiempo para hacer aquello que nunca hemos tenido tiempo. Y algo muy importante, cuidar la economía familiar, empezar a planear como sobrellevar económicamente la cuarentena, es apremiante considerar las opciones de trabajo desde casa.
Todo ello para no enloquecer en este periodo de cuarentena.
Gracias por pasar a leer amigos! Sigamos en casa, cuídense y disfruten lo mejor que puedan del tiempo en casa.
Hasta la próxima!
Todas la imagenes son de mi autoria, realizadas en casa con ayuda de mi hijo.
Amigo Emilio, excelente escrito y más las imágenes.
Estupendo trabajo amigo.
Te felicito.
Gracias estimado @leomolina, me alegra que le gustara, y gracias por pasar a leer y dejarme tu impresión!
Rayos! Me encantó el " Y falta más" . . . Estos días han sido días de gloria para nosotros! Saludos desde MARACAY!
jajaja... me alegra que te gustara estimado @manuelramos, mis saludos desde Punto Fijo!