Hace unos días pude volver a Doña Angela.
Cerré los ojos e imagine las mil historias que había escuchado de ese lugar.
En la entrada, arriba de esa tranquera, los vi, fumando un cigarrillo a escondida de los "grandes", contando confidencias entre hermanos y primos. El estanque, ahora vacío, representaba el alivio del calor, después de toda una mañana cosechando al sol, la tarde era su premio y el agua de molino los gratificaba.
Una mujer cocinaba, observando el campo desde la ventana, mientras que Dionisio, adentro de un galpón, construía casillas rodantes y soñaba con que las lleven a navegar por las rutas.
the photographs you took of the place are really beautiful.
Que lindo que es el campo 💗