Y la vida le preguntó..

¿Qué llevas en tu equipaje?
Acaso el mar y cielo juntos
donde se fluye como el viento.

O tal vez un pedazo de sol
robado cuando los ojos abrieron.

Tal vez unas gotas de lluvia
que acariciaron tu alma
aquella que a veces pesa
otras que traen la calma.

Todo cabe en la maleta
menos aquella rosa
que en su vida tanto amaba
se secaron sus pétalos
al dejarle abandonada.

Una tinta y un papel
un lienzo y una piel
un corazón abierto
y una alma en el desierto.

Todo, todo eso cabe
en el equipaje que yo tengo...