Despierto en medio de la calle y no recuerdo nada, me duele todo el cuerpo, sé que la razón es porque fui atropellado por el carro que está a un lado de mí. Hay una mujer a mi lado, parece no tener vida; supongo que nos atropellaron juntos. Algo me dice que debería reconocerla, pero no lo hago. No recuerdo nada, ni siquiera mi nombre.
Una mujer llegó asustada gritando, los paramédicos trataron de calmarla pero no pudieron hasta que la dejaron verme. Era mi esposa, al menos eso fue lo que dijo. Mostró todos mis documentos de repuesto porque al parecer los perdí todos en el accidente. Vieron a alguien robarnos mientras estábamos inconscientes. La mujer a mi lado sí estaba muerta, la vieron protegerme del accidente, no sé por qué; ella se llevó la peor parte.
Después de los exámenes al llegar a nuestra casa fue muy incómodo no recordar nada, no reconocer las fotografías de nosotros. Los médicos dijeron que la memoria comenzaría a regresar poco a poco con el tiempo, pero han pasado meses y aún no recuerdo nada. Observar las fotografías no ayuda, tampoco hablar con las personas que nos conocían, aunque son pocas, muchos no se han acercado, no sé por qué.
Hace unos días le pedí a mi esposa separarnos, desde el accidente nuestra relación fue decayendo y no me sentía cómodo. Ella quería tener hijos, me dijo que ambos queríamos tener hijos, pero querer hijos es algo que no me provoca, y menos con una mujer a la que no recuerdo si amo o no. Ella lloró, dijo que lo entendía, pero que le dolía mucho que la dejara después de tantos años juntos.
Hoy vamos a firmar el divorcio de mutuo acuerdo, la reunión es en el despacho de su abogado, hace poco salí del psicólogo con el que he estado teniendo sesiones después de haber perdido la memoria. El despacho tiene una antesala por lo que supongo no saben que he llegado antes de la hora y los puedo escuchar hablar.
—¿Puedes creer que después de todo lo que hice por él ahora quiere separarse de mí? —La escucho a ella decir, parece indignada, pensé que estaría triste, al menos así ha estado desde que lo hablamos.
—Sabías que existía esta posibilidad, no importa nada de todo lo que hayas hecho por él, en algún momento podía decidir alejarse de ti y ese momento ha llegado. —Lo dice como alguien que ya sabía que esto iba a suceder, pero no porque haya perdido la memoria, por algo más.
—Lo sé, tan solo quiero quejarme. No solo falsifiqué todos sus documentos, las fotos de toda la vida que quise tener junto a él; hice que lo atropellaran con la suerte de que perdió la memoria y también resultando su madre muerta. Lo tuve por unos meses, pero ya no quiere nada, ni siquiera pude tener un hijo de él para que lograra quedarse conmigo. ¡Incluso logré que sus hermanos no volvieran a preguntar por él!
En algún momento dejo de escuchar la conversación y salgo corriendo de ahí. Comienzo a tener dolor de cabeza mientras camino por la ciudad desorientado hasta de la nada me regresa la memoria. Escuchar la conversación era el detonante que necesitaba para que todos mis recuerdos regresaran. Entro en algún bar y pido ron, sin hielo, después ordeno una cerveza. Trato de no llorar por la muerte de mi madre pero es imposible, la vi muerta junto a mí y no la reconocí, ¿cómo pudo suceder eso? Ella tiene que pagar por esto y sé la manera perfecta para hacerlo.
Que genial Jau, me gusta mucho como escribes, tienen mucho talento caballero de los corazones negros, que genial leerte.
Saludos cordiales
Extrañaba leer tu mente desequilibrada, mientras te escucho relatar la historia. Hermoso.
Nooo dude, te pasaste con esta historia. Me encantó. Sería genial que creases una sección en donde relatas tus propias historias, chachu, 10/10. Perdón por no haber leído antes, estaba ajetreado por unos asuntitos. Loviu dude.
JAJAJAJAJ Falta la segunda parte, que aún no me decido hacer porque se me ocurriendo muchas ideas y no sé cuál usar. XD
Es posible que lo haga, que coloque el enlace para que puedan escucharme relatar también, pero mucha flojera últimamente.
Gachias, loviu.