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La verdad no se como empezar este texto, porque después de un rato pensando sobre que escribir, la verdad es que no me decidí, y opté por simplemente escribir. Escribir sin un objetivo concreto, así como uno de repente camina simplemente por caminar, por el gusto de hacerlo y de explorar áreas que le son desconocidas, con la esperanza siempre latente, y que por lo general se cumple como si fuera una profecía, de llevarse alguna sorpresa en el camino.
Y es que hace rato que quiero encontrar una fórmula que me permita hacer esto: escribir sin tener algo definido sobre que escribir, pero que de alguna manera pueda sistematizar o acotar lo mínimo necesario para poder repetirlo en cualquier momento, pero sin quitarle esa naturalidad y autenticidad que da el escribir sin tener nada planeado.
He hablado de esto antes, y desde entonces la idea ha seguido rebotando en mi cabeza sin detenerse, y a cada día, a cada volver a darle la vuelta al tema siento que tengo el formato más y más cerca pero sencillamente no se deja atrapar. Pero creo que si espero a tenerlo totalmente claro nunca podré empezar a llevarlo a cabo, así que este será el primer texto de esos que hace rato que quiero escribir, lo he decidido ahora, en este momento. Ya se irá definiendo mejor en el futuro, conforme se vayan acumulando las ediciones del mismo.
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Y ahora que lo pienso un poco, creo que ha pasado algo que me ha ayudado a decidirme, y es que por enésima vez tengo publicaciones para pasan totalmente desapercibidas, al menos por un tiempo más largo del habitual. Y en esta ocasión puedo decir con toda, o casi toda la sinceridad de la que soy capaz, que no me importa. Escribir se ha vuelto poco a poco para mí más en un destino que en un medio.
O sea, cada vez más persigo menos escribir algo concreto, y a veces hasta me da flojera hacerlo, y me inclino más por escribir sin saber sobre que, literalmente para "ver que sale". Y seguramente saldrán cosas, como ya pasado muchas veces antes, que no esperaba y dan pie a algo en que me entusiasma invertir tiempo para crear algo un tanto más concreto y menos indefinido.
Poemas y cuentos, que son lo que más escribo, han surgido así, cuando empiezo a escribir sin saber bien sobre que estoy escribiendo, y esto se me revela al final, o cuando releo el texto a medias, después de días y hasta semanas, cuando a veces ya ni me ha acordaba de él. Es como si de repente recordara lo que iba a escribir y que en su momento no escribí porque no lo recordaba. Es algo extraño, pero sumamente satisfactorio.
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Leiva, uno de mis descubrimientos e inspiraciones recientes, ha empezado a escucharse por las bocinas de mi equipo de sonido hechizo, o sea hecho de partes de otros equipos:
Supe que eras una ensoñación
me habías mal acostumbrado
puede que mañana estemos oxidados
con el premio de consolación
temblando en nuestras manos
eternos y atrapados
pero nunca, nunca libres
Así que tal vez sea momento de ponerle alto momentáneo a las cosas, que esta canción me ha dado una idea, y ustedes tienen que seguir con sus vidas, ese camino sin final en que todos andamos hasta que nos topamos con la pared invisible de la muerte (final dramático innecesario pero que suena bien). Hasta la próxima.
©bonzopoe, 2022.
Si llegaste hasta acá muchas gracias por leer este publicación y dedicarme un momento de tu tiempo. Hasta la próxima y recuerda que se vale dejar comentarios.
