“Martes 13, ni te cases ni te embarques ni de tu casa te apartes.”
Refrán popular
Llegó el martes 13, y la tierra dio su vuelta número 73 alrededor del sol desde el nacimiento de Carmen.
Vaya conjugación de elementos para marcar el sendero de esta guerrera de la vida: Marte el dios de la guerra y la destrucción unido al número 13 considerado por la tradición popular como un día de mala suerte. Sin embargo, ese día la calurosa tierra zuliana en Venezuela la vio nacer.
Una vida como la de muchos campesinos, que con grandes sacrificios sacaron adelante a su familia, rompiendo con cualquier mal augurio que pudiera haberle deparado el destino.
¡Allá va Carmen! dice la gente cuando la ve pasar, pero al instante se les pierde y no saben hacia donde agarró la doña.
Y es que Carmen con sus 73 años no para en casa; siempre anda de un lado a otro ayudando a los más necesitados o visitando y atendiendo a la familia –que son su pasión– sin importar en qué lugar o país se encuentren.
Toda mi vida la vi echando carreras, buscando recursos y donaciones para distribuir entre las necesidades de su casa y la de los vecinos más humildes de la comunidad.
Una antigua foto me trajo recuerdos de sus travesías, deambulando por las calles, buscando algún trabajo que hacer para compensar la escasa remuneración que recibía como maestra en un pequeño colegio privado de la ciudad.
Con dos pequeños niños tomados de la mano en cadena, uno agarradito del otro, y el menor en los brazos, camina un largo trecho para dejarlos al cuido de alguna amiga caritativa, mientras ella busca el sustento del día a día; pues, su esposo se ha ido a otra ciudad a buscar alguna fuente de empleo que no consigue en la ciudad donde residen.
Ella, cansada de haber migrado de ciudad en ciudad donde su esposo buscaba que la fortuna le sonriera, decidió erradicarse en la localidad donde nació su tercer hijo, dejando que él siguiera en su interminable periplo por otros lares.
No era analfabeta pero tampoco estudiada, pues su campesino padre decía que las mujeres solo debían culminar los estudios primarios y luego dedicarse a hacer cursos de cocina, costura y otros que le permitieran cumplir con sus deberes como esposa; mas ella, rebelde y testaruda, decidió continuar sus estudios, haciendo espacios entre los trabajos y las ocupaciones del hogar. Muchas veces la vi, pasada la media noche, rendida de cansancio sobre sus cuadernos en la mesa del comedor.
Ese empeño por los estudios se convirtió en una obsesión, llevándola a obtener un título universitario y una maestría, y de no ser por la crítica situación económica del país, seguro a esta edad estaría haciendo su doctorado en la Universidad de Monte Morelos en México, como eran sus sueños.
¡Como admiro a esa señora! que levantó a sus hijos prácticamente sola, ya que el viejo no sentó cabeza hasta que sus hijos ya estaban grandes.
Hoy sus arrugas decoran su reseca piel, mientras su blanca cabellera cubre su cabeza como el velo de una monja que ha vivido toda su vida para servir a los demás.
Si la ves pasar a tu lado, no trates de detenerla o alcanzarla; ella corre como el viento sin mirar a los lados, con su vista puesta en el horizonte y su mente inmersa en sus sueños.
Ella es mi madre.
veac130421
El 22/09/2020 @Monster-One cedió una foto a la Comunidad @Motherhood para un concurso en homenaje a las madres llamado "Haz a tu mamá La Protagonista", pero en su momento no pude participar; por eso, aprovechado el cumpleaños de mi madre, acá les dejo esta historia.
Conmovedor relato amigo @eliezerfloyd. Gracias y muchas bendiciones a toda la familia.
Gracias por esas bendiciones, querida Lis.
Ha sido un relato escrito con el alma para ese ser a quien debo mi vida entera.
Saludos.
Que bueno este relato. Un placer leerte. Un homenaje a muchas mujeres latinoamericanas. Muchas gracias por compartir en este encuentro.
Mi madre como muchas otras en Venezuela y el mundo, es un vivo ejemplo de como las mujeres sacan adelante a su familia a pesar de las duras circunstancias que les toque vivir.
Vaya un homenaje para todas ellas.
Pasando a darle amor a tu post #malomilove
Gracias por tu constante apoyo, bella Malomi.
Me gustó mucho este relato y más en la voz de @miguelmederico fue épico. Gracias por compartir en Encuentro de Talentos y eres bienvenido todos los martes a las 8:0pm en tu cala PAL.
Buena vibra.
El amigo @miguelmederico es todo un apasionado de la literatura y un declamador consagrado que admiro profundamente, y fue un verdadero honor haber escuchado este relato en su magnífica voz.
Gracias por tu apoyo y solidaridad 😘
H E R M O S A D E D I C A T O R I A...
Espero que un día la grabes en video y también que le guste a tu mamá. Es un homenaje a su ímpetu, a su inteligencia para criarte y a las emociones que afrontó y superó para verte ser el hombre que eres. Está precioso, mi pana.
Querido amigo. Cuando te escucho declamarar un poema con fondo musical, me recuerdas a mi madre que es toda una poetiza. Ella habría estado encantada de oír este relato en tu voz.
Gracias por el apoyo y valoración.
de nada, pana, este es una obra que merece mucho, pero sobre todo tiene un gran valor emocional. Saludos
Que hermoso escrito, y se nota que las letras salen del alma. Gracias por compartir tus escritos. Un saludo.
Efectivamente, amigo. Del alma a la mente, y de la mente a la mano para honrar a esa magnánima mujer.
Un placer compartir mis letras con todos ustedes.
Que bello relato, me encantó!!! Es un hermoso reconocimiento para esa gran mujer que te abrió los caminos para crecer 😍🥰
A ella le debo todo lo que soy, y este relato es apenas un pequeño homenaje que hago con todo el el amor que cabe en mi.
Gracias por leerme y apoyar mi post.
Como siempre hermano, magnífico trabajo no puedo creer que tengas tanta creatividad y un talento gigante para expresar eso, nawara eso es una obra de arte, deberias tokenizar los poemas o venderlos pues son unicos =D!
Gracias por tus bellas palabras, hermano. Con tal fuente de inspiración, prácticamente las manos escriben solas.
Saludos bro.
Sentido texto, escrito con gran afecto, hacia esa mujer, habitante de nuestra cotidiana realidad, que se entrega por completo a su compromiso de vida y a darle concreción a sus sueños. Has escrito un relato reflexivo que rinde un hermoso tributo a tu madre, @eliezerfloyd. Las madres latinoamericanas, en su mayoría, son seres casi divinos, capaces de grandes sacrificios, incluso de su propio confort, para responder a sus responsabilidades (valga la redundancia). Y tú, a través de este emotivo texto, les haces homenaje. Saludos.
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Indudablemente que estos ángeles tienen un origen divino. Madres creadoras, madres criadoras, madres del alma, madres que nos han hecho ser lo que somos hoy en día.
Gracias por tu valoración y apoyo.