EL BIGOTÓN ESTÁ LOCO DE BOLA!!!

in #informationwar5 years ago

Primero debo aclarar que la expresión “loco de bola” no tiene nada de malsonante o de grosería. Ángel Rosenblat, en su excelente trabajo “Buenas y malas palabras” demuestra que esas referencias a una bola no tienen nada que ver con la anatomía masculina, sino con la perfección o la totalidad, pues la esfera es la forma más perfecta y completa que existe.

Hecha esta aclaratoria, paso a explicar de quién hablo y por qué: Hablo del usurpador bigotón cuyo nombre no quiero escribir ni pronunciar, que ayer aseguró públicamente, hablándole especialmente a los militares, que él viajó al futuro y vio que no hay inconvenientes para la revolución. Si lo cree, está loco de bola, y si no lo cree, también, porque decir esa estupidez y creer que no va a tener consecuencias el decirlo, linda con la locura, o mejor dicho, es locura.

Como es locura creer que la actitud firme de la inmensa mayoría de los países que cuentan como importantes, de no reconocer al usurpador como presidente de la república, no va a tener consecuencias. Entre otras cosas, es posible, y se están dando los pasos para que sea un hecho, que esos países se nieguen a pagar cualquier cosa a la Venezuela chavista.

Sobre todo los Estados Unidos y otros países que todavía le compran petróleo al nuestro. Y si se niegan a pagar hasta que el usurpador abandone Miraflores, el régimen no va a tener ni siquiera con qué pagar los sueldos de la administración pública, y mucho menos recursos para sobornar militares corruptos y comprar voluntades, lo que significa que tendrá que dejar el escenario. Y pronto los militares que lo sostienen le darán la patada histórica.

Seguramente que esa es la causa de la amnistía a la que se refirió Juan Guaidó, que aunque moleste a muchos puritanos, es una excelente idea. El 23 de enero todo el pueblo debe salir a la calle a respaldar a la Asamblea legítima y a Guaidó, para que esa patada se pueda dar ya y el país no siga en su brutal camino descendiente. Es cuestión de vida o muerte, y quien crea lo contrario también está loco de bola.