En la vida siempre no se gana. Siempre no te sale todo bien. No todo es bueno. La película que hoy nos ocupa, vista hace unos días... va en el grupo de todo lo que no sale bien. No es una buena película, lo diré claro. De la plataforma Netflix hace unos días vi "Puertas Abiertas" originalmente conocida como "The Open House".
Fuente La verdad es que no esperaba nada de ella. Con esto de Netflix que le das al play y ya se reproduce, no es lo mismo que con otras webs piratillas donde había que pensarlo un poco más antes de ver cuanto tardaba en cargarse un poco para que comenzase a reproducirse y luego cruzar los dedos para que no se detuviese. Ahora es diferente le doy ya está. Pero lo dicho no esperaba nada de ella y nada encontré. No me voy a esforzar mucho con esta crítica. Historia mala, sin ningún interés ni novedad. Esta mal historia nos cuenta como una madre y un hijo, futuro atleta olímpico, se van a vivir a la case de una pariente a raíz del fallecimiento del padre para desconectar y llevar mejor el luto. Una vez en la casa comienzan a pasar cosas raras que carecen de sentido alguno a partir de que la casa está en venta y uan día a la semana la gente va a visitarla y pueden deambular por sus dependencias tranquilamente. A partir de estas visitas de gente extraña suceden cosas extrañas. No hay más
Fuente Escenografía sin relevancia, diálogos simples, personajes manidos, actuaciones mediocres.... no hay por donde cogerla. Esperar que hay más. Ritmo lento, efectos regulares, sustos sin originalidad, banda sonora... no recuerdo nada que llamase la atención. Y para acabar y poner la guinda a este despropósito....dónde está el miedo. Yo os lo diré, por ningún lado. Netflix se podría haber ahorrado el puñado de dólares que se gastó en ella. No gastéis ni un segundo de vuestro tiempo. No la veáis. Un saludo y recordad que me seguiré sacrificando por vosotros viendo estas bazofias. ___________________________________________________ ________________________________