Al igual que Saulo de Tarso, Dios tiene su mano poderosa sobre todos los creyentes. Así que aquí en HECHOS 9:18 leemos de nuevo: Y al momento le cayeron de los ojos como escamas, y recibió al instante la vista; y Pablo recuerda este hecho en HECHOS 22:13 cuando dice esto sobre Ananías: Y yo en aquella misma hora recobré la vista y lo miré.
Ananías luego habló algunas palabras a Saulo de Tarso, que no están registradas para nosotros en HECHOS 9, pero se encuentran en HECHOS 22. El Apóstol Pablo da un poco más de detalles y completa los espacios en blanco sobre lo que Ananías tenía que decir a continuación.
HECHOS 22:13-16 vino a mí, y acercándose, me dijo: Hermano Saulo, recibe la vista. Y yo en aquella misma hora recobré la vista y lo miré. Y él dijo: El Dios de nuestros padres te ha escogido para que conozcas su voluntad, y veas al Justo, y oigas la voz de su boca. Porque serás testigo suyo a todos los hombres, de lo que has visto y oído. Ahora, pues, ¿por qué te detienes? Levántate y bautízate, y lava tus pecados, invocando su nombre.
Estas palabras de Ananías fueron palabras inspiradas en el Espíritu Santo, como notaremos en la siguiente discusión en los versos 14 y 15.
HECHOS 22:14-15 Y él dijo: El Dios de nuestros padres te ha escogido para que conozcas su voluntad, y veas al Justo, y oigas la voz de su boca. Porque serás testigo suyo a todos los hombres, de lo que has visto y oído.
Estas palabras fueron esencialmente lo que el Señor le había revelado a Ananías en HECHOS 9:15-16. Específicamente el el verso 16 que fue el Señor quien debía revelar a Saulo de Tarso las grandes cosas que debía sufrir por el bien de mi nombre. Sabiendo que era asunto del Señor revelar ciertas cosas a Saulo de Tarso.
Ananías de Damasco quedó impresionado por Jesús mismo cuando el Señor le reveló que Saulo de Tarso era un "vaso elegido" en HECHOS 9:15 El Dios de nuestro los padres te han elegido. Además, el Espíritu Santo inspiró a Ananías en este momento a decirle a Saulo de Tarso que debería conocer su voluntad, y ver al justo, al Solo Uno, y escuchar la voz de su boca. Las palabras "al justo" hicieron eco alto y claro en los oídos de Saulo de Tarso.
La primera vez que estas palabras inspiradas por el Espíritu Santo "al justo, solo uno" fueron escuchadas por Saulo de Tarso fue cuando fueron pronunciadas por Esteban HECHOS 7:52 ¿A cuál de los profetas no persiguieron vuestros padres? Y mataron a los que anunciaron de antemano la venida del Justo, de quien vosotros ahora habéis sido entregadores y matadores;, recordad que estas palabras "cortaron el corazón” de los que las escucharon, siendo Saulo de Tarso uno de ellos.
Por supuesto, el "Justo" se refiere a Jesús. Nadie aceptó "al justo" como su Salvador personal en HECHOS 7, pero las palabras de Esteban en ese capítulo pincharon el corazón de Saulo de Tarso desde entonces.
Querido lector, seas bendecido en cada área de tu vida!
"La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén." 2 Co. 13:14
Material de apoyo Biblia Reina-Valera RVR1960
