Para poder enfrentar de manera más eficaz las situaciones que nos va presentando la vida, es necesario conocernos a nosotros mismos, así podremos actuar sin miedo o inseguridad, sabiendo de qué somos capaces y cómo podemos utilizar nuestras destrezas para solucionarlas. Nuestra capacidad de reflexionar y de gestionar de nuestras emociones, así como la conexión con nuestro ser, nos ayuda a clarificar lo que realmente queremos y nos ahorra muchos tropiezos.
No todo es blanco o negro, por lo que debemos tener un pensamiento flexible, es algo que me ha costado procesar. Recuerdo que una vez, una conocida me comentó que yo era como el bambú, que ante un movimiento brusco podía llegar al piso, pero sin doblarme, de manera totalmente recta; en otra ocasión me habían dicho que soy muy vertical, lo que me hace entender que tengo esa debilidad, porque esa posición no me permite disfrutar plenamente la vida. Debo aprender a ser maleable y adaptarme mejor al entorno, claro, sin perder mi esencia.
Hay que aceptar las contradicciones, lo que no quiere decir que formemos parte de ellas o que estemos de acuerdo, simplemente tenemos que ser capaces de analizar cada situación, sacar nuestras propias conclusiones y seguir adelante, sin que eso se vuelva un asunto sin resolver en nuestra vida. No tenemos por qué entender, ni por qué estar de acuerdo con todo; todo es relativo y cada quien mira las cosas de forma diferente. Debemos tomar siempre lo que nos es útil y dejar a un lado lo que sólo es una carga, nuestra mochila debe ir liviana para que nuestro transitar sea más cómodo.
Cada una de estas habilidades, son parte de nuestra inteligencia, que nos ayudan a resolver problemas y a adaptarnos a cualquier circunstancia, haciéndonos más competentes y afianzando nuestra autoestima. Aunque nuestra tendencia natural sea intentar comprender el porqué de todo y reflexionar de manera constante acerca de nuestra existencia, la practicidad nos obliga a movernos tras la dinámica de actuar en pro de nuestros objetivos, en lugar de suspender el tiempo en búsqueda de respuestas. Sin embargo, tener la habilidad de combinar nuestra parte reflexiva con la ejecutora, logrando un equilibrio que maximice los resultados, es un nivel superior que no muchas personas desarrollan.
No es fácil encontrar esa combinación de virtudes que neutralicen nuestros defectos y que nos hagan un mejor ser humano y además, productivos. Creo que cuando estamos en este plano terrenal, pasamos toda la vida intentando ser merecedores del amor que nos es dado y queremos llenar las expectativas un alguien, que para quien es distinto, para algunos de nosotros puede ser Dios, para otros algún amor o puede tratarse simplemente de ti mismo.
Sueña todo lo que quieras, haz todo lo que te atrevas, llega tan lejos como puedas
Me siento feliz y agradecida de tener este espacio en el que compartir Mis reflexiones antes de dormir.
Gracias a todos los que lo hacen posible y a ustedes que dedican tiempo a leerme.
La fotografía mostrada es de mi propiedad y usé la aplicación PhotoCollage para decorarla.
Emojis hechos con Bitmoji.
El separador usado lo elaboré en PowerPoint.