Siguiendo con la descompresión de la vergüenza global y personal con el objetivo de drenar todo ese sufrimiento dentro de nosotros, vale mucho la pena atacar de frente uno de las sensaciones a las que la vergüenza se arraiga profundamente. La sensación de insuficiencia.
Si eres como yo, seguramente crees que tienes buenas razones para sentirte insuficiente. En parte se debe a que muchas veces hemos vivido con esto durante tantos años y lo hemos normalizado hasta el punto cultural, que ni siquiera nos molestamos en desafiarlo, en rebatirlo.
En este post no voy a convencerte usando ideologías, ni palabras cariñosas. Es decir, naturalmente hablo de una manera sutil, pero no es porque intente endulzar la verdad contigo, ya que la vergüenza extrema nos da una falsa sensación de que nos ayuda a mejorar, así que parece que cuando uno opta por lo contrario, estamos favoreciendo al conformismo, pero nada que ver. Voy a decirte por qué es muy valioso defender la idea pero más que nada la sensación de que eres suficiente.
1.- Porque es verdad
Si algo nos ha enseñado la vergüenza es que es muy valioso tener la razón. Usar fuentes fidedignas. Pero, ¿investigamos realmente por curiosidad o por tener la razón?
Te invito a tener curiosidad sobre la siguiente pregunta: ¿Quién te dijo que debías sentirte avergonzado siempre?
A mí me dijeron hace mucho tiempo que Dios sufría amargamente por los pecados de la humanidad. Jesús no la puso fácil cuando dijo que incluso en el pensamiento también pecábamos, de modo que debía conformarme con vivir con el peso de la decepción de Dios siempre encima de mí.
Tal vez por eso quise ser santo con tanta fuerza, así como también acercarme a Él, porque una parte de mí quería escuchar otra cosa, quizás librarse de ese yugo, pero como ocurre para la gran mayoría, solo tenía acceso a sus representantes terrenos. La respuesta de ellos era:
"Dios te ama aunque seas un pecador"
Es decir, aunque lo haga sufrir todos los días, seguía amándome. Desde luego, esa idea hacía que lo amara todavía más y peor era mi vergüenza por simplemente existir ya que, como entenderás, ser humano es equivocarse.
Pues bien, una observación cuidadosa de la vida años después me hizo entender que, fuera de los lugares sagrados o de otros seres humanos nada realmente te juzga. Ni siquiera cuando te caes durante una caminata en el campo. O cuando tropiezas con una piedra. No escuchas a los árboles gruñir tu fracaso ni a las aves graznar de risa, incluso siendo seres vivientes también. Pero sí tienes una mente que no te lo deja pasar.
A pesar de la increíble crudeza de la naturaleza que vemos en muchos documentales, tal parece que el drama de la vida animal y vegetal es bastante silencioso. Sin juicio alguno más que las consecuencias, que no vienen con las manos vacías sino con invaluables lecciones. Así, entendemos que los ganadores tienden ser los que aprenden más rápido a navegar los obstáculos de la vida equivocándose más. Y de hecho se diría que la adaptación es una muestra de ello.
Ahora bien, ¿invalida esto a la religión? para nada. Jesús en ningún lado predicaba la verguenza de la forma en la que lo hacemos hoy. Tal vez porque sabía bastante bien el siguiente punto.
2.- Sentirte mal te quita autocontrol
¿Qué haces cuando te sientes resfriado o con malestar?
Normalmente lo que suele ocurrir es que todo te cuesta el doble y por eso estás más irritado, ya que aún así hay cosas que hacer. Pues bien, podríamos decir que eso es útil ya que nos obliga a descansar... ¿pero qué hay cuando te sientes avergonzado todo el tiempo ante tus inalcanzables expectativas?
Entonces sufres de verguenza crónica que se te atasca en el pecho. Como la tienes allí, tu mente intenta distraerte del dolor en innumerables cantidades de vicios, ilegales o legales como verte 2 maratones de series seguidas, comer comida que te hace daño. Tú sabes los impulsos que te dan cuando te sientes incómodo y encima, debido al efecto emocional supresor que tiene la tecnología, te perderás en ese bucle porque nunca terminas de sentirte mejor así que tendrás que volver a ello una y otra vez.
Aún si el efecto de la verguenza no fuera tan fuerte en ti, también es interminable porque lo que suele pasar es que nunca termina por desaparecer aunque obtengas lo que quieres. Aunque te veas bien, te dices que te podrías ver todavía mejor y pudieras caer en hacerte innumerables cirugías. Aunque ganes dinero, te dices que necesitas todavía más, hasta que llegue el punto en que medio del éxito no te permitas sentir ni un ápice de satisfacción porque siempre hay algo imperfecto que falta. Algo que siempre te estorba.
Aún hay cosas que debo decirte sobre como esta emoción, en su estado más dañino, puede controlar en tu vida. Así que sígueme a una segunda parte, querido lector, para que veamos como nos podría más bien ayudar dejar esas viejas nociones atrás.
¡Un saludo!
Continuing with the decompression of global and personal shame with the aim of draining all that suffering within us, it is very worth attacking head-on one of the sensations to which shame is deeply rooted. The feeling of inadequacy.
If you're like me, you probably think you have good reasons to feel insufficient. Part of it is because we have often lived with this for so many years and have normalized it to the point culturally, that we don't even bother to challenge it, to refute it.
In this post I am not going to convince you using ideologies or affectionate words. I mean, I naturally speak in a subtle way, but it's not because I'm trying to sugarcoat the truth with you, since extreme shame gives us a false feeling that it helps us improve, so it seems that when one chooses the opposite, we are favoring to conformism, but far from it. I'm going to tell you why it is very valuable to defend the idea but most of all the feeling that you are enough.
1.- Because it is true
If shame has taught us anything, it is that it is very valuable to be right. Use reliable sources. But do we really investigate out of curiosity or to be right?
I invite you to be curious about the following question: Who told you that you should always feel ashamed?
I was told a long time ago that God suffered bitterly for the sins of humanity. Jesus didn't make it easy when he said that even in thought we also sinned, so I had to settle for living with the weight of God's disappointment always on me.
Maybe that's why I wanted to be a saint so strongly, as well as get closer to Him, because a part of me wanted to hear something else, perhaps get rid of that yoke, but as happens for the vast majority, I only had access to His earthly representatives. Their response was:
"God loves you even if you are a sinner"
That is to say, even though I made him suffer every day, He still loved me. Of course, that idea made me love him even more and worse was my shame for simply existing since, as you will understand, to be human is to make mistakes.
Well, a careful observation of life years later made me understand that, outside of sacred places or other human beings, nothing really judges you. Not even when you fall during a walk in the countryside. Or when you trip over a rock. You don't hear the trees growl at your failure or the birds squawk with laughter, even though they are living beings too. But you do have a mind that won't let it slide.
Despite the incredible rawness of nature that we see in many documentaries, it seems that the drama of animal and plant life is quite silent. Without any judgment other than the consequences, which do not come empty-handed but with invaluable lessons. Thus, we understand that winners tend to be those who learn the fastest to navigate life's obstacles by making more mistakes. And in fact it would be said that adaptation is an example of this.
Now, does this invalidate religion? not at all. Jesus nowhere preached shame the way we do today. Maybe because he knew the next point quite well.
2.- Ill feelings takes away your self-control
What do you do when you feel a cold or you are sick?
Normally what happens is that everything costs you twice as much and that is why you are more irritated, since there are still things to do. Well, we could say that this is useful since it forces us to rest... but what about when you feel embarrassed all the time by your unattainable expectations?
Then you suffer from chronic shame that gets stuck in your chest. Since you have it there, your mind tries to distract you from the pain with innumerable amounts of vices, illegal or legal, such as watching many tv marathons in a row, eating food that hurts you. You know the impulses you get when you feel uncomfortable and on top of that, due to the suppressive emotional effect that technology has, you will get lost in that loop because you never end up feeling better so you will have to go back to it again and again.
Even if the effect of shame is not so strong on you, it is also endless because what usually happens is that it never ends up disappearing even if you get what you want. Even if you get to look good, you tell yourself that you could look even better and you could end up having countless cosmetic surgeries. Even if you make money, you tell yourself that you need even more, until you reach the point where in the midst of success you don't allow yourself to feel even an ounce of satisfaction because there is always something imperfect that is missing. Something that always gets in your way.
There are still things I need to tell you about how this emotion, in its most damaging state, can control your life. So follow me to a second part, dear reader, so we can see how leaving those old notions behind could help us.
All the best!
Very interesting and informative! We sometimes attach too much unnecessary weight on ourselves, especially with our reactive thoughts and emotions. Self control is important to live in this world and not lose yourself in it. There are so many streams pushing and pulling us in so many directions, twisting our mental and emotional states like the proverbial wind caught in the storm. No wonder we often feel lost, not enough, or a lack of something tangible.
Yeah, normally we are like the fish in the ocean. Not aware we are sorrounded by water because it's taken for granted. I feel the dynamics of shame are similar, we are just coded by the media and culture we should be ashamed until we get some sort of goal, often pushed by marketing, were cops in the mainstream series have awesome cars and trucks yet in real life they can barely live through.
Exactly, we're so ingrained in it that it never crosses our mind to question whether this is normal or not. Such interesting times we live in.