Más allá del precio, la volatilidad, o de su valor especulativo, considero que hay dos factores fundamentales que le dan un valor real a las criptomonedas:
- La tecnología que está detrás de cada proyecto, es decir la aplicación a través de la tecnología blockchain, que deriva en el uso real que puede tener esa criptomoneda, para de esta forma solucionar algún problema y/o necesidad en nuestra vida cotidiana, en nuestro trabajo, empresa, hobbies, etc.
- La comunidad que está detrás de cada proyecto, entendiendo por “comunidad” a todos los actores que están involucrados de alguna manera en esa criptomoneda, y que permiten su crecimiento, consolidación y mantenimiento en el mercado, desde los mineros, desarrolladores, intermediarios, hasta los usuarios finales.
En tal sentido, teniendo en cuenta esos dos factores fundamentales, me parece que el consenso y los objetivos claros dentro de una comunidad terminan siendo de suma importancia para lograr un entorno saludable en relación al proyecto de una criptomoneda, y así permitir que esta pueda desarrollarse, lograr primero sus objetivos tecnológicos, y de esta manera abrirse paso hacia un futuro dentro de la nueva economía digital y descentralizada.
