Pobrecita tu hijita! Yo he tenido muchas muchas mascotas y tener que despedirlos aún hoy con 43 años es muy duro.
Cuando se ponga mal tu hijita decile que recuerde las cosas lindas que vivió con su mascota...
Las lágrimas se transformarán en tenues sonrisas y su corazón se llenará de alegría!!
Muchas gracias por todos tus consejos.