Todo comercio callejero tiene su génesis en la plaza de algún poblado árabe donde confluyen estrechas callejuelas, llena de personas que venden y compran a la par que socializan.
Ingenioso el toque de humor con que nos llevas y nos traes entre el pasado y el presente de dos culturas, descubriendo puntos que las vuelven comunes en sus diferencias.
Gracias por el disfrute de la lectura 🌻
Que bonito comentario, me encanta que te gustara 💚
Si, esa fue la inspiración. Las lecturas en la niñez y adolescencia salen y te dicen que de alguna manera hemos estado viajando, en el tiempo y los lugares a los que la palabra nos transporta 🙏
Trabajé 2 años en Argelia, los mercados junto a la modernidad conservan la tradición. Sobre todo la figura del comerciante, que propone un precio inicial que lleva el juego del regateo. Los compradores pensamos que logramos una buena rebaja, pero el comerciante no pierde, pues quedaría en bancarrota. Algo curioso, el regateo funcionaba más en el comercio de productos no alimenticios. Los alimentos, de por sí, no eran muy caros.
Que bien, imagino esos espacios llenos de todo tipo de cosas hermosas y curiosas. Me perdería días enteros.
El regateo es algo que nos hemos perdido a la hora de comerciar en Cuba, creo que eso hace más divertida la venta y le da un toque cálido aportando más valor a lo comprado. Pagar y ya, no atesora una anécdota alrededor del objeto y le hace perder una vida propia... Además de la satisfacción (aunque ficticia) de creer saliste ganando 😁.