Eso que dijo es muchas veces la base de todo, el orden de prioridades.
Muchas veces se pasa por estos momentos al priorizar más a otros que a uno mismo, no todos saben valorar o por lo menos apreciar lo que se hace por ellos.
Y muchas veces damos a nuestro entorno lo que queremos recibir o esperamos que nos regresen las cosas de la forma que uno quiere y cuando no pasa así. Todo se torna gris e impotente.
Sentimos que no servimos y siempre debemos desechar esos pensamientos. Ninguno tiene fallas, sólo falta de mantenimiento que como lo dije, es la dedicación y el amor hacía nosotros mismos.
La madurez también aplica y es de gran importancia, a medida que vamos obteniendo más experiencia o momentos similares, nos volvemos no sólo fuertes, sino sabios, sabemos como afrontarlo y lo que necesitamos para cada ocasión.
Gracias mi querida madre por pasar por aquí, aprecio cada palabra y me llena de dicha leerla. I love you 😘💕 @mirian-liz