A una buena parte de las personas se les hace muy fácil hablar sin pensar, ofender y herir los sentimientos de otros pero pareciera que humanamente son incapaces de pedir disculpas. Aún cuando se dan cuenta que han cometido un error o que han lastimado a alguien más su orgullo les impide reconocerlo delante de ésa persona.
Muchos se distancian un tiempo como para dar chance a qué olvides lo que te hicieron y luego buscan el acercamiento tipo hechos los locos como si nada y nosotros lo tomamos como muestra de arrepentimiento pero es como tu dices, hace falta la disculpa, es necesario para sanar. Si fue tan fácil herir debería serlo pedir perdón si no se tenía la razón.
Otros simplemente lo dejan así. Dañan, ofenden, se dan cuenta que metieron la pata pero el orgullo les impide reconocerlo y disculparse y la solución que les favorece es alejarse y perder la relación con la otra persona. Eso les resulta más fácil que doblegar su orgullo.
Lamentablemente las palabras hacen un daño irreversible y a veces aún con la disculpa el daño ya está hecho. Pero definitivamente hace falta. Es necesario ser responsable de lo que hacemos y decimos y tener la valentía de decir lo siento cuando es necesario.
Así mismo, hay daños que ni las disculpas reparan, pero a veces sí son efectivas estas.
Es mejor tomar la distancia cuando el patrón de actitudes negativas se repite, una cosa es que cometas un error y otra muy distinta es que sigas haciendo lo que ya sabes que a la otra persona le afecta.
Muchas gracias por tu comentario💙
Actúan como los gatos 🐱.