Me quedé atónita leyéndote,tocaya, el miedo y el hijo que iba en ese carro te impulsaron a correr sin parar, no quedaba sino hacer eso, nunca nos imaginamos lo que podemos llegar a hacer en un determinado momento.
Gracias por contarnos.
Abrazo.
Me quedé atónita leyéndote,tocaya, el miedo y el hijo que iba en ese carro te impulsaron a correr sin parar, no quedaba sino hacer eso, nunca nos imaginamos lo que podemos llegar a hacer en un determinado momento.
Gracias por contarnos.
Abrazo.
Saludos tocaya jamas lo olvido, no sé de donde saqué esa resistencia de ir gritando y corriendo, las cosas insólitas que nos hace hacer el miedo, gracias por la iniciativa mi abrazo y respeto.