A muy pocos les debe gustar vivir a la intemperie, a la mayoría nos gusta estar bajo techo disfrutando de alguna seguridad, eso quizá nos va generando la idea de que lo mejor es que las cosas no cambien. Creo que es normal sentir miedo a los cambios, que no sea lo mejor es otra cosa. El libro nos pone en una situación complicada, aceptar que los cambios son una realidad. Siendo las cosas así, lo más conveniente es estar preparados para cuando lleguen. Vencer el miedo y atreverse a explorar el laberinto es un gran reto.
Disfruté mucho leyendo tu publicación querido @pablo1601. Muy sincera. Tu testimonio deja importantes enseñanzas. Gracias por compartir. Que estés bien. Un fuerte abrazo desde Maracay.
Muchas gracias por tus palabras querido @irvinc !
Vos sabes que toda mi vida he sido un tipo que vivió muchos aspectos de la vida bajo los mandatos sociales, no por elección propia, sino por que las cosas debían ser así.
Hasta hace diez años mis estructuras mentales poco flexibles y era todo un tema llevar el día a día buscando dejar contentas a terceras personas y muchas veces descuidando lo que yo sentía, lo que necesitaba.
Romper con esas estructuras sin dudas genera mucha incertidumbre, genera temores que muchas veces me hacía repensar si en verdad quería dejarlas atrás o seguir como hasta hace poco.
Siento que con este libro roto alguna otra estructura aún montada en mi mente, y ello no significa que vaya a tirar todo lo hecho por la borda, sino estar atento, estar preparados para cuando nuevos rumbos se abran, porque quién busca, tarde o temprano termina encontrando.
Gracias por tus amables palabras, son una gran motivación para mí!
Abrazo enorme