Hay notas tan discordantes, que ni siquiera pueden disimularse detrás de la más completa de las sinfonías, a no ser que como en el caso de Beethoven, la sordera sea una bendición...
Hay notas tan discordantes, que ni siquiera pueden disimularse detrás de la más completa de las sinfonías, a no ser que como en el caso de Beethoven, la sordera sea una bendición...
Así es, amigo. Hay momentos en los que ni la sordera o la ceguera ocultan los tonos discordantes y grises. Bonito domingo para ti