Buenos días LECTORES, buenos días COMPAÑEROS de Steemit, buenos días VIDA.
Fuente: Imagen diseñada por mí en Power Point.
Esta historia, que no es de fantasía ni de ficción, es real; es la experiencia de como una madre, una mujer, tuvo que tomar la Decisión más difícil de su vida.
Todo comienza tres semanas atrás, cuando le llega un audio de su hermano, éste, el que se encuentra en un país lejano desde hace más de 3 años, y el mensaje decía lo siguiente:
Hermano: hermana, ya no aguanto más, me traigo a mi muchacha. Ya lo decidí, no espero más, se viene con las personas de la Agencia E. C.
Desde ese momento la mujer no dejaba de pensar su situación económica y la de su familia, pero sobre todo, la de su hija mayor, ya con 19 años, a pocos meses de cumplir 20 años, aún no había logrado casi nada en su corta vida.
Día a día veía como su hija, la mayor, se frustraba, todo le molestaba, no le provocaba hacer nada. En cada fecha especial, como la del día de la madre y del padre, intentaba hacer algo de dinero.
Con su gran inteligencia, por ser muy buena estudiante, dictaba cursos de inglés, física, química y matemática; tenía que recorrer un trayecto de hora y media de camino para lograr conseguir tan solo 2 o 3 dólares diarios a 2 o 3 niños de bachillerato.
Esa era la pobre vida de esta joven y su madre tenía que ver día a día como se consumía en su tristeza y frustración.
Sin decir nada, solo pensamientos imprecisos, indecisos, de ¿cómo hacer para conseguir más dinero?
La mujer y su familia no contaba con casi nada, unos instrumentos musicales como dos guitarras y una mandolina, además, una motobomba.
Decidió por varios días seguidos publicarlas en grupos de whatsapp para tratar en lo posible venderlas y así poder reunir para un posible pasaje.
Pasaron los días y nadie, en ninguno de los grupos de compra venta preguntaban por la mercancía.
Los días transcurrían, cada vez quedaba menos tiempo para la partida de su sobrina, a quien su hermano ya le había cancelado el viaje para el país donde él se encontraba.
Entre sueño y sueño pensaba en ¿de qué otra manera podía conseguir dinero?, pero no se le ocurría nada, y el monto que le faltaba era superior al que ella tenía, es decir, más de la mitad.
Un día amanecía ilusionada en que lograría conseguir el dinero, pero otro día, viendo que no pasaba nada, volvía a entristecer.
Un día, entró al cuarto de su hija y empezó a conversar con ella, haciéndole preguntas, algunas incluso “hipotéticas”:
Madre: ¿qué haces?
- la hija, encogiendo sus hombros y muy seria respondió:
Hija: nada - la madre como de costumbre, se acostó en su cama.
Madre: ¿qué es de la vida de Javier? - Javier es un “amigo especial” que vive lejos, justamente en ese país donde vive el hermano de la mujer.
Hija: él está bien.
Madre: ¿desde cuándo no hablas con él?
Hija: todos los días hablo con él, un ratico, pero justo ahorita está trabajando.
Madre: mmmmm
Madre: ¿y qué te parece lo de tu prima?
Hija: me alegro mucho por ella.
Madre: ¿y esta vez no vas a decir nada, que se va del país en autobús?
Hija: bueno mami, que puedo decir, ella está desesperada, extraña mucho a mi tío y ya no aguanta a la mamá. - momento de silencio, la mujer pensaba ¿cómo preguntarle otro tipo de cosas?
Madre: hija… si se te diera la oportunidad de viajar, de la misma manera, en autobús, un viaje largo de 8 a 10 días, ¿lo harías? - otro momento de silencio, luego la hija respondió:
Hija: creo que sí, si me iría.
Madre: mmmmm
Madre: ¡sabes que tu prima dice, que con el favor de Dios, va a reunir para mandarte dinero para que luego te vayas para allá!
Hija: si, yo sé, mi prima también me lo dijo, pero no me hago ilusiones… sé que no es fácil reunir.
Madre: tienes razón, al estar en otro país, viendo tantas cosas nuevas, diferentes, buenas, ella querrá tenerlas y siempre pospondrá lo del dinero para después. - nuevamente se hizo el silencio en la habitación, ninguna de las dos dijo nada.
Y así la madre, luego de estar ese momento con su hija, sale, aún más angustiada, queriendo hacer tanto por su familia, su hija, pero no poder por falta de dinero.
Cierto día pensó en lo positivo y negativo del hecho de que su hija mayor se fuera del país.
Si se va:
- ¿Quién me va a ayudar cada vez que haga mercado?, ella es la única que hasta ahora me ayuda.
- ¿Quién me va a cuidar cuando me enferme?, sus demás hermanos están es solo pendientes de ellos mismos.
- Es la única que aporta dinero para ayudar con la compra de la comida, poco, pero aporta.
- La extrañaría muchísimo.
Además:
- Lo peligroso que es viajar y meterse por trochas.
- Viajarían solo dos mujeres, jóvenes, sin nadie más que las acompañe.
- Viajarían sin documentos, es decir, llegarían a un país donde uno de sus requisitos más importantes es la visa, y ellas no la tenían.
Los días seguían pasando y esta mujer veía como su sobrina colocaba en su estado la cantidad de días que faltaban para su gran viaje.
Cierto día, uno de esos que la sobrina visitó a la tía y se quedó a dormir en su casa, la tía le comentó:
Tía: señorita sobrina, quiero decirte algo…
Sobrina: dígame señora tía…
Tía: me encantaría que tu prima se pudiera ir contigo, en ese mismo viaje, así, ni tú viajas sola, ni ella viaja sola en el futuro…
- la sobrina se emocionó e incentivó a la tía para que pusiera sus cosas a la venta.
- la tía le explicó que ya lo había hecho pero no salió nada.
- la sobrina le volvió a insistir e incluso le dijo que ella la iba a ayudar a vender las cosas.
La tía le pasó las imágenes a la sobrina e inmediatamente lo publicó en sus redes sociales. Pero, pasaron los días y no pasó nada de nada, nadie preguntó.
Y así como la mujer pensaba en todo lo negativo y todo lo que estaba en su contra, también pensaba en las cosas positivas que pudiera conseguir su hija si lograba salir de este país, que lo única que hacía era hundir cada día más y más a su familia en un estancamiento económico.
- Dejar de ser egoísta.
- La tristeza de su hija se borraría de su cara.
- Lograría encontrarse con su “amigo especial”
- Tendría un mejor futuro.
- Pudiera ayudar aún más a su familia.
Cada vez que esta mujer pensaba en un, hasta ahora, posible viaje para su hija, lejos de su familia, el corazón de esta madre se encogía y lloraba de tristeza.
Era una Decisión sumamente difícil la que tenía que tomar, y la que no podía compartir con nadie, porque muy en el fondo pensaba que era una loquera, tontería, algo casi imposible de poder hacer.
Era una suma alta la que le faltaba para completar el costo total del pasaje, pero, existía una pequeña lucecita, una pequeña puerta que aún no había tocado.
Le daba miedo, pensar en una posible negativa si llegaba a tocar esa puerta. Nuevamente la mujer se puso en modo “negativa”. Pasaron unos días, seguía sin decirle nada a nadie, consumiéndose ese pensamiento solo en su mente.