Hace un par de domingos y aprovechando que podíamos hacer un escapada de novios visitamos la colección del Museo Ruso de San Petersburgo. El edificio de la antigua tabacalera de Málaga, un edificio precioso, alberga la exposición anual “Guerra y Paz en el arte ruso” y las exposiciones temporales “Lev Tólstoi. El camino de la vida” así como “Iván Aivazovsky y los pintores marinistas en Rusia”.
De las tres exposiciones, la de Aivazovsky fue la que más me gustó supongo que por su forma de dibujar el mar. El mar en todos sus estados y la espectacular luz del sol en los amaneceres y atardeceres. Para ver estas exposiciones en un caluroso día de agosto, me puse este vestido verde que compré hace un par de años en Oysho y sigo usando verano tras verano porque es muy fresquito y cómodo.
Y no sólo es fresquito y cómodo sino que es muy estiloso. En un tono verde azulado, lleva un cuello muy especial en la parte delantera, quedando muy escotado en la zona de la sisa. Queda muy ajustado en la cintura con un cinturón hecho en el mismo tejido que el vestido. De cintura hacia abajo el vestido tiene bastante vuelo con un tejido con mucha caída y una tela muy fluida y fresquita. El vestido tiene un largo midi, tan de moda estos últimos años.
Complemento el vestido con un sombrero de paja estilo borsalino con una banda de tela en color marrón chocolate. Las gafas de sol marrones de Gigi Barcelona combinan a la perfección con el verde del vestido y como bolso escogí un bolsita en tejido de paja, muy veraniego. Las sandalias de tiras finas en dorado completaban el look.
El resultado final es un look estival a la par que elegante, ¿no creéis?
Me encanto ese look. Muy fresco y especial para el verano. Saludos.
Excelentes imágenes. Imagino que el fotógrafo es el de la "escapada de novios". aliriera