Me parece un relato muy sincero y profundo sobre la importancia de la actitud en nuestras vidas, debo decir.
Quiero empezar expresando mi admiración por tu valentía al abrirte de esta manera y reflexionar sobre esos aspectos tan personales.
Es normal que en momentos de introspección, nos cuestionemos nuestra actitud, en cómo esta puede influir en nuestros logros y en cómo nos sentimos, con respecto a nosotros mismos. Es de valientes reconocer tu patrón de pensamientos negativos y cómo estos pueden estar afectando tu vida y tus objetivos.
También es cierto que, a veces, nuestras propias barreras internas, como el miedo, la inseguridad o la falta de confianza en nosotros mismos, pueden limitar nuestro potencial y nuestros éxitos; De esto, no tengo duda alguna.
Ver tu determinación de trabajar en mejorar tu actitud y creer más en ti misma, es de admirar, porque, como bien dices, la actitud no es estática, sino que podemos cambiarla y mejorarla, pues es un proceso que requiere mucha práctica, autoconocimiento, aceptación de nuestras debilidades y fortalezas, y la voluntad y determinación de trabajar en nuestro crecimiento personal.
Una actitud positiva puede mover montañas y contagiar energías positivas a quienes nos rodean. Sobre la influencia de la crianza, los miedos y otros aspectos en nuestra actitud, es muy acertada, pues debo reconocer que yo mismo he estado en las entrañas de ese monstruo, pero cuando se reconocen estas influencias, nos permiten tomar las riendas de nuestra vida y trabajar en ser la mejor versión de nosotros mismos, un día a la vez
Solo me resta agradecer que hayas compartido esto, pues me doy cuenta, que nunca estamos solos batallando con algunas cosas.