Fuente
El escenario es un basurero, allí hay desechos tirados por todas partes y entre esos cuatro niños, dos varones, uno vestidos de papel con manchas de sucio por todo el cuerpo y otro de botella plástica de refresco y dos niñas que son una batería y una lata donde vino algún alimento.
Un niño vestido con ropas humildes entra al escenario y cuando está cerca de los anteriores el que está vestido de papel se levanta.
El niño asombrado pregunta
NIÑO: ¿Quién eres?
PAPEL: Soy una hoja de papel muy triste y defraudada porque me han votado sin darme el uso adecuado.
Con cara de interrogación el niño dice:
NIÑO: ¿Qué uso?
PAPEL: Me han escrito por un solo lado y luego me han arrugado y tirado al bote de basura junto a desperdicios húmedos, en lugar de colocarme con los secos y llevarme a una fábrica de reciclado donde me hubiera transformado junto a otros igual que yo, en otro papel, eso evitaría la destrucción de más árboles.
Cuando termina de hablar se levanta la lata y dice.
LATA: Yo también pensé que podía ser reutilizada pero acá me encuentro entre esta podredumbre, condenada a morir olvidada o a ser golpeada como balón de futbol por algún niño como tú. ¿Me patearás?
El niño le responde.
NIÑO: No
LATA: ¿Seguro?
NIÑO: No voy a hacerte daño.
LATA: Estaba feliz porque mi cuerpo estaba lleno de un rico alimento para las personas, pensé que lo agradecerían pero después de abrirme simplemente me botaron.
En ese momento se levanta la batería y dice:
BATERIA: ¿Que puedo decir de mí? Todos creen que soy inofensiva, me pueden usar para muchos artefactos y cuando ya mi cuerpo desgastado no tiene más carga eléctrica entonces soy una candidata más para el basurero, pero se olvidan de algo importante, soy toxica, si alguien me tira al agua la contamino y si está llega a ser tomada por algún humano puede morir. Esto es porque mi cuerpo es de cadmio, níquel, plomo, mercurio y otros metales.
En eso se levanta la botella plástica de refresco y grita señalando a la batería:
BOTELLA: ¿Toxica tú? Puedes disolverte en la tierra y enriquecer el suelo con tus metales pero yo no me desintegro como los dinosaurios y puedo estar millones de años contaminando todo, ya hasta una isla de plástico hay en el océano, y es cierto que algunos me reúsan y hasta han fabricado paredes conmigo pero soy algo que nunca debió existir.
El niño dirigiéndose a los cuatro desechos les pregunta:
NIÑO: ¿Qué puedo hacer yo?
La lata triste con gesto de tristeza le dice.
LATA: Nada
De pronto el papel le propone.
PAPEL: Llévanos a tu casa y úsanos en algo, conmigo puedes hacer un barquito de papel, claro, después de limpiarme.
LATA: Yo puedo servirte para que metas tus metras.
BOTELLA: A mí me puedes lavar bien y llenar de desinfectante.
BATERIA: Yo no sé para que pueda servirte yo.
El niño les responde.
NIÑO: No importa, me los llevo a la casa.
Los cinco salen del escenario.
Gracias por compartir tu contenido con la comunidad de El Arca (@elarca), el mismo ha sido votado por nuestra iniciativa de curación artística @stellae. Si deseas puedes delegar HP al proyecto: Delegate 25 HP Delegate 50 HP Delegate 100 HP Delegate 250HP Delegate 500HP
Excelente obra, no es fácil escribir para niños y este tiene todos los elementos pedagógicos necesarios