He visto personas que viven con una tristeza constante, literalmente con una tristeza que vienen arrastrando desde hace años, incluso décadas, y definitivamente eso es algo bastante enfermizo. No puedo entender como alguien puede vivir de esa manera, lo instauran en sus vidas como una manera de ser que se irradia a todo lo que hacen, y es algo muy lamentable.
Lo peor es que este tipo de personas no suelen aceptar consejos con respecto a lo dañino que eso puede llegar a ser para su organismo, para sus relaciones sociales en general, porque es lógico que ninguna persona va a querer trabajar o pasársela con una persona que tenga ese tipo de energía constante en su vida, porque es muy muy dañino, en extremo.
Y no se trata de no querer ayudar o colaborar con estas personas, el problema es que esta situación termina por afectar mucho a todos quienes están cerca de quien tiene esta actitud de tristeza permanente, de la misma manera que a la alegría puede ser contagiosa igualmente la tristeza lo es.
Las emociones negativas como la rabia, la tristeza suelen tener graves efectos sobre nuestro cuerpo, tienden a disminuir nuestras defensas por horas, nos hace más propenso a enfermedades, no me quiero imaginar lo que ocurre en el cuerpo de alguien que a asumido este tipo de emociones como manera de vivir, es absurdo, pero es una realidad, lamentablemente.
He tenido la oportunidad de compartir con personas que tienen esta característica, y debo decir que no ha sido experiencia agradable en lo absoluto, sólo el hecho de intentar mantener mi buen humor resultaba muy agotador, sólo con la intención de no dejar que su estado de ánimo me contaminara, porque es como eso, una especie de contaminación que termina siendo my dañina, y lo mejor es mantenerse al margen. Por eso digo que no se trata de no querer ayudar, sino que la misma persona no lo hace, y más bien parece que pretende arrastrar a todos en esa dirección.
Puedo entender que hayan tenido una mala experiencia en el pasado, algo que les haya marcado y les ponga a ver la vida de otra manera, pero no se justifica que se pasen el resto de su vida así, pretendiendo que todos deben hacer lo posible por entenderles y soportarles, cunado se hacen un gran daño a ellos mismos y a los demás, es un tema complicado, lo sé, pero forma parte de una realidad.
Es realmente un mecanismo de defensa, al menos eso es al principio, como un caparazón que los hace sentirse "seguros". Coincido contigo al momento en que esto genera un problema para sí mismos y las personas a su alrededor, es agotador y un desafío mantener el buen animo con una persona que mantiene una herida que no sana y no deja sanar. Muy buen post, saludos.