Sábado, día de hogar, de familia, de descanso y también un día ideal para consentirse y darse gustos.
La semana está llena de deberes, que cuando se asumen con una buena actitud, no se hacen una carga y podemos vivir tranquilamente con ellos, sin que nos quiten la paz ni la energía.
Sin embargo... ¡Qué ricos son los fines de semana!... Quedarse en la cama hasta tarde, ver películas, dedicar tiempo para nuestro cuidado personal y hasta me gusta poder ordenar un poco.
Pero hay más: Los sábados son el día de compartir el almuerzo en familia en casa de mi suegra. Cada sábado, se congregan en su casa todos sus hijos con esposas y nietos y tenemos la bendición de disfrutar una rica sopa o algún otro menú especial, como el de hoy, que fue hamburguesas... Sólo miren el tamaño de la que me he comido y estaba tan rica que aún recuerdo el placer que me causó cada bocado. Agradezco a mi cuñado y a mi suegra, que se esmeran siempre al preparar ricas comidas.
Se me ocurrió tomarle una fotografía a mis hijos almorzando, pero fue muy cómico, porque cuando les dije que me regalaran una foto, mi hijo enseguida posó para la cámara, pero mi hija alcanzó a decirme: ¡mami, estamos comiendo! y capturé esta imagen en medio de su réplica. Me sentí como una paparazzi entrometida, pero igual fue algo agradable.
Después de comer, me senté en el sofá, a mi lado estaba mi esposo, desde allí veíamos a mis hijos con sus primas conversando amenamente, cada uno contaba sus anécdotas y todos reíamos entre una historia y otra. Disfrutaba verlos a todos juntos, detallando cómo se llevan de bien. Gracias a Dios ellos se aman y comparten sus días con alegría. Intentaba guardar cada detalle, estar muy presente y atesorar ese valioso instante de vida. Logré capturar esta imagen, que aún después de haberla editado en PowerPoint, transmite la esencia de esa reunión de primos.
Las cosas más valiosas de la vida no son cosas, creo haber leído eso en alguna parte y es una frase que revela una gran verdad ¿Cuántos de nosotros no estamos rodeados de nuestros seres amados y no tenemos alegría de vivir, porque siempre sentimos que nos falta algo. Igual hay personas que tienen mucho dinero y no son capaces de ser felices.
Debemos tener la capacidad de disfrutar todo lo que tenemos: el dinero es un muy buen amigo que hace nuestra vida más fácil, nuestros seres amados son un regalo del cielo que nos enseña el amor y la salud es nuestra mejor aliada, que nos permite disfrutar al máximo de todo lo demás.
Siempre es bueno recordar lo valiosos que somos como hijos de Dios, que tenemos el universo a nuestros pies, con una abundancia infinita a nuestra disposición y que sólo debemos encontrar la forma de conectarnos a ella, un camino es el agradecimiento.
La vida desde el agradecimiento, es una vida llena de bendiciones.
Gracias a todos ustedes por tanto...
La fotografía mostrada es de mi propiedad y usé la aplicación ToonMe para decorarla.
Emojis hechos con Bitmoji.
Separador elaborado en PowerPoint a partir de la imagen principal.
Se ven muy buenas las hamburguesas.