Yo estoy pasado por ese regreso a clases. Mi hija menor y yo nos habíamos acostumbrado a las clases a distancia, ella en realidad no tiene muchas ganas de asistir, lo hace porque no le queda otra, peor es buena estudiante.
He sido un padre muy liberal en ese aspecto. Aunque se que la formación es importante, hay muchas cosas que no me gustan del sistema educativo del país , sea publico o privado, se rigen por pensum arcaico.
Yo fui un estudiante promedio, cuando ya estaba en cuarto año quería que se acabara ese tormento. No me importaba pasar con poca nota, para mi l importante era pasar. No soy el mejor ejemplo para mis hijas jajaja. Ellas son aplicadas, salieron a la madre que si se exigía y graduó con altas notas tanto en bachillerato como en universidad.
Recuerdo la época de comprar útiles escolares y añoro la emoción de niño con los cuadernos nuevos, el uniforme nuevo, la insignia, todo eso. Era bueno en materias teóricas, pero muy malo en matemáticas, eso fue lo que me traumo de la época de primaria y secundaria jajaja
Todo esta carísimo y me faltan el uniforme y zapatos deportivos para mi hija. 😅
La verdad que el cambio después de la pandemia para el regreso a las actividades de forma normal, fue impactante para todos en todos los ámbitos y más aún en el escolar. Nos costó demasiado adaptar a los hijos en el sistema de estudio en casa y luego que se adaptaron, volver a lo tradicional, también es difícil de lograr que se acostumbren a ello.
Sin embargo, siempre será bueno para ellos el poder socializar y salir al mundo como se dice 🤭pero, coincido contigo en que si cuesta. Mi hijo está a nivel universitario y le costó volver a las aulas. Pienso que en el caso de los más pequeños, quizás está el incentivo de la inocencia referida al compartir de los juegos y ver a sus compañeritos.
Lo de los costos es todo un tema. Las listas escolares son un testamento sin final 🤣 pero ni modo, hay que cumplir con ello. Creo, desde mi opinión personal, que se extralimitan pidiendo tantas cosas que a veces ni se utilizan en el año escolar.
De ese tiempo recuerdo las cosas bonitas, tanto en mi tiempo, como en el tiempo como madre, el ir a comprar los útiles y ver la emoción de mi hijo escogiendo cosas que le gustaban como las cartucheras y el papel de forrar los libros . Son muchas emociones bonitas, que es la parte que hay que atesorar pues, los hijos, crecen muy rápido y luego se van.
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