“En la diferencia radica la fortaleza por lo que a veces se transforma en el tesoro más oportuno...”
¡Saludos a todos!
En este nuevo reto hispaliterario, nos invitan a escribir sobre un pequeño polluelo con plumas en espiral. Inspirándome en ello, presento un relato donde el protagonista, a pesar de ser diferente, logra enfrentar un mundo hostil a su corta edad. Prepárense para adentrarse en un mundo único, lleno de reflexiones poderosas. A continuación, les comparto el texto para su consideración y comentarios.
Hago extensiva para que participen en esta iniciativa a @edujo y a @yorgar. Enlace del post de invitación: Click aquí
Es hora de romper el cascarón…
Estoy ansioso porque sabía que llegaría este día. No puedo imaginar qué hay detrás de este cascarón, que ahora siento más frágil. Aquí adentro solo hay oscuridad y una mezcla gelatinosa que empapa mi delicado cuerpo. El proceso es lento, pero la verdad es que estar aquí es bastante duro; a veces, por mi prolongada postura, mi cuerpo queda paralizado.
Por instinto lo primero que hago es tratar de llegar al exterior. Poco a poco mi pico ayuda a erosionar el caparazón donde estoy.
Sí, llegó la hora. Finalmente, se ha roto la concha. Mientras un centelleo logra cegar mis ojos, y por primera vez siento el calor, un gran cuerpo me cubre con sus largas plumas. Por fin, conozco a mi mamá gallina, quien me mira algo horrorizada, sin imaginarme por qué.
Es la primera vez que estiro mis patas. Mis alitas comienzan a secarse, pero con el paso del tiempo y el calor de mi madre, fácilmente gano destrezas.
Somos seis polluelos, ellos son casi iguales, sin embargo, el color de mis plumas son verde, diferentes a las de los demás, y peor aún todas enredadas en forma de espiral, haciéndome pasar antes los demás un fenómeno por mi extraña condición física.
-¡Pío... pío...!- cantamos todos. Pasaron el día dejándome de último e ignorándome, pero así me quedo con ellos en casa. Compartimos un paseo por el patio, donde un montón de hombres se asombraban por mi forma. Sus rostros dicen lo que soy y ven.
Comienza a oscurecer por la tarde. Busco un lugar apartado para dormir y veo a lo lejos unos ojos brillantes que se acercan, con una mirada intensa y hambrienta, con garras afiladas clavadas en la tierra mientras se aproxima sigilosamente. La luz del sol disminuida desaparece, filtrando su escasa presencia por los árboles cercanos, haciendo relucir su pelaje negro y brillante, dándole un aspecto aún más siniestro, al gato.
Su cuerpo delgado y ágil se mueve con una gracia felina, cada músculo tensándose en cada paso que da. Sus ojos amarillos y brillantes parecen hipnotizar a mamá gallina, quien, a su vez, aletea con frenesí tratando de protegernos.
Veo que el gato avanza lentamente, con paso seguro, sabiendo que la victoria es inminente. Sus sentidos están agudizados, su instinto le dice que las presas están cerca y que su hambre será saciada oportunamente.
Finalmente, con un salto rápido y preciso, el gato se abalanza sobre ellos, sus garras se aferran a los polluelos mientras los agita con ferocidad. La gallina chilla desesperada, trata de liberarse del felino, pero es en vano. El gato ha ganado.
Estoy apartado del grupo, la escena se muestra desalentadora por lo que hace sucumbir al patio en un silencio largo, pero ensordecedor después del horroroso ataque.
Triste es ver el panorama vacío con mamá gallina y los polluelos muertos. El gato se aleja con su mirada fría y calculadora, indicando que no hay nada que pueda detener su hambre insaciable. Pero yo, con plumas verdes en forma de espiral, tal vez mi diferencia marcó mi existencia para sobrevivir ante esta cacería infernal.
Incluso, en ciertas noches percibo los ojos brillantes y lo peor, más cerca de lo normal.
-¡Pío... pioooo!-
J.R.M.(@siondaba)
English Version
"In the difference lies strength, which sometimes transforms into the most opportune treasure..."
¡Greetings to everyone!
In this new hispaliterary challenge, we are invited to write about a little chick with spiral feathers. Drawing inspiration from this, I present a tale where the protagonist, despite being different, manages to confront a hostile world at a tender age. Get ready to delve into a unique world, filled with powerful reflections. Below, I share the text for your consideration and comments.
I also extend the invitation to participate in this initiative to @edujo and @yorgar. Invitation post link: Click aquí
It's time to break the shell...
I am anxious because I knew this day would come. I can't imagine what lies beyond this fragile shell. Inside, there's only darkness and a gelatinous mixture that soaks my delicate body. The process is slow, but being here is quite tough; sometimes, my body becomes paralyzed from the prolonged position.
By instinct, the first thing I do is try to reach the outside. Slowly, my beak helps erode the shell I'm in.
Yes, the time has come. Finally, the shell has cracked. As a shimmer blinds my eyes and I feel warmth for the first time, a large body covers me with its long feathers. Finally, I meet my mother hen, who looks somewhat horrified, without me imagining why.
It's the first time I stretch my legs. My wings start to dry, but with time and the warmth of my mother, I easily gain skills.
We are six chicks, they are nearly identical, but my feathers are green, different from the others, and worse, all tangled in spiral form, making me pass as a phenomenon due to my strange physical condition.
"Peep... peep..." we all sing. They spent the day leaving me for last, ignoring me, but I stay with them at home. We take a stroll in the yard, where a bunch of people marvel at my appearance. Their faces convey what I am and what they see.
As the evening darkens, I search for a secluded spot to sleep and spot bright eyes in the distance, with an intense and hungry gaze, sharp claws digging into the ground as it approaches stealthily. The diminished sunlight disappears, filtering its faint presence through the nearby trees, making its black and shiny fur gleam, giving it an even more sinister look—the cat.
Its slender and agile body moves with feline grace, every muscle tensing with each step it takes. Its bright yellow eyes seem to hypnotize the mother hen, who, in turn, flutters frantically trying to protect us.
I see the cat advancing slowly, with confident steps, knowing that victory is imminent. Its senses are heightened, its instinct tells it that the prey is close, and its hunger will be satisfied in due time.
Finally, with a quick and precise leap, the cat pounces on them, its claws gripping the chicks as it shakes them ferociously. The hen squawks in desperation, trying to free herself from the feline, but in vain. The cat has won.
I am separated from the group, and the scene is disheartening, causing the yard to succumb to a long but deafening silence after the horrifying attack.
It's sad to see the empty panorama with the mother hen and the dead chicks. The cat walks away with its cold and calculating gaze, indicating that nothing can stop its insatiable hunger. But I, with green feathers in spiral form, perhaps my difference marked my existence to survive this infernal hunt.
Even on certain nights, I perceive the shining eyes, and worse, closer than usual.
-"Peep... peep..."-
J.R.M.(@siondaba)
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