Voy a comenzar este blog con una frase que me encanta decir: “Una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa”. Y es que, cuando atravesamos una situación fuerte en la vida, nos cuesta con el alma pensar en el perdón. Primero, debemos pensar más allá. ¿Perdón?, ¿disculpa? Antes, con un ego enorme, decía "disculpa" a los demás y reservaba el "perdón” que solo Dios me debía otorgar. Pero, ¿realmente esto es así? Pues la respuesta, según "San YO", es: no. Puesto que, aunque si me preguntas, la palabra "disculpa" suena más linda, "perdón", cuando se hace una falta grave, suena con mayor fuerza.
Ahora, ¿perdón y rencor? Me parece que son dos sentimientos que no pueden caminar juntos. El perdón te libera del rencor y simplemente te llena de aprendizaje. Un aprendizaje que guardas en tu corazón para no cometer más el error que hizo que te hicieran daño, o aprendieras el cómo lo hicieron, pero es un aprendizaje que no duele. En cambio, el rencor se apodera de tu vida, te hace daño y no te deja avanzar.
Hoy haré una confesión que me hizo daño mucho tiempo. Sufrí bullying en el liceo. Por usar la falda larga, por no peinarme como algunos querían o por no comportarme con hombres como otras chicas veían "normal". Ese bullying me hizo sentir tan mal al punto de yo no querer entrar a clases y crear en mí inseguridades inexistentes. Me sentía juzgada constantemente, como si cada uno de mis movimientos estuviera bajo un microscopio. Las palabras hirientes resonaban en mi cabeza, haciéndome dudar de mi propio valor.
Recuerdo que me costaba mucho trabajo concentrarme en clase. El miedo a las burlas y a los comentarios malintencionados me mantenía en un estado constante de ansiedad. Me sentía diferente, incomprendida y sola. Llegué a creer que había algo malo en mí, que no encajaba en ningún lado. Incluso llegué a aislarme de mis amigos, pensando que también me juzgarían.
Hoy en día, aprendí el valor de amar quien soy, de respetar mis decisiones, de ser crítica ante lo que sucede y, sobre todo, ver, ayudar y empatizar con aquellos que sufren lo mismo. Entendí que mi valor no depende de la opinión de los demás y que mis diferencias me hacen única. Aprendí a aceptarme tal como soy, con mis virtudes y mis defectos.
Y si me preguntas si guardo rencor por esas personas que hicieron eso, diría que no. Pues soy consciente de que guardar ese sentimiento es aportar importancia en mi vida sobre algo que pasó hace demasiado. Más bien, sigo en esa búsqueda de sanar, y soltar. Y soltar también es perdonar y no atarme a ningún mal sentimiento. El rencor es como una carga pesada que te impide avanzar, te ancla al pasado y te roba la paz.
Es que imagínense cómo viviríamos si ante cualquier situación guardáramos rencor. Siento que es un sentimiento tan negativo que viviríamos amargados, tristes, apagados en cierto modo y, lo peor de todo, enfermos. El rencor se manifiesta de muchas maneras: insomnio, dolores de cabeza, problemas digestivos, entre otros. Es un veneno que nos consume por dentro.
Ya que el verdadero perdón te libera, te sana y te restaura, y aunque no es algo que suceda de un momento a otro, es una situación que se debe afrontar para así poder ser más feliz. El perdón no significa justificar las acciones de los demás ni olvidar lo que pasó. Significa liberarte del peso emocional que te causa el rencor y abrirte a la posibilidad de sanar.
Perdonar es un proceso que lleva tiempo y esfuerzo. No es fácil dejar ir el dolor y la rabia, pero es un acto de amor propio que te permite recuperar el control de tu vida. Es importante recordar que perdonar no es un favor que le haces a la otra persona, sino un regalo que te haces a ti mismo.
Que nadie quite tu paz, sé resiliente. La resiliencia es la capacidad de adaptarte a las situaciones adversas y salir fortalecido de ellas. Es la fuerza que te impulsa a seguir adelante a pesar de las dificultades. Cultivar la resiliencia te ayuda a superar el rencor y a construir una vida más plena y feliz.
En conclusión, el perdón es un camino hacia la liberación y la sanación. El rencor, por otro lado, es una cadena que te ata al pasado y te impide avanzar. Elige perdonar, elige liberarte, elige ser feliz. Recuerda que tú tienes el poder de transformar tu vida y construir un futuro lleno de paz y bienestar.
Posted Using INLEO
Congratulations @enmagabriela! You have completed the following achievement on the Hive blockchain And have been rewarded with New badge(s)
Your next target is to reach 15000 upvotes.
You can view your badges on your board and compare yourself to others in the Ranking
If you no longer want to receive notifications, reply to this comment with the word
STOP