Hoy precisamente programé un post con algo relacionado, porque hace unos días estuve a punto de no publicar un vídeo y grabarlo de nuevo solo porque el fondo que use no me gusto.
Después descubrí que lo que estaba mal no era el fondo, sino que estaba siendo extremadamente exigente conmigo. Lo cual no esta mal, pero cuando vamos a la realidad nos damos cuenta que es precisamente eso lo que nos detiene. El querer hacer las cosas perfectas, bien sea por el miedo a la critica, o por inseguridades.
Y es eso lo que marca la diferencia de quién lo logra y quién no. Quienes lo logran se arriesgaron contra todo pronostico, mientras que los que se preguntan todavía si esta bien o no una letra o un fondo.
Eso me hizo pensar en que estoy perdiendo oportunidades por pensar demasiado en cosas en las que quizás nadie se fije.
Excelente post Saray, y bastante importante porque nos ayuda a reflexionar sobre lo que tanto nos paraliza.