Los cubanos siempre han sido buenos boxeadores, solo lamento como Rigondeaux se vio contra Lomachenko hace un par de años, a partir de allí su carrera se vino abajo, pero es un gran peleador, así como el muchos otros.
Por otro lado, es un gran hito que los peleadores de Cuba puedan pelear de forma profesional, si se hubiese logrado eso años atrás la historia boxistica quizás tendría más peleadores cubanos de renombre.