Coincido, aunque en este deporte tan profesionalizado, con tantos negocios dando vueltas, donde jugadores que apenas sobresalen de la mayoría se venden por cifras astronómicas, donde la FIFA impone leyes como si fuera un estado, nada importa y las leyendas quedan arrumbadas en un rincón, aunque duela.
Pero para muchos que lo hemos visto jugar, que disfrutamos de su juego, de sus victorias y sufrimos con las derrotas y las frustraciones, quedará para siempre en nuestro corazón su imagen de extraordinario deportista y de gran persona.
Saludos @rodrikun17