
Imagen de mi propiedad
Un regalo
A lo largo de nuestras vidas hemos dado en algún momento un regalo, los motivos son diferentes porque puede ser especial, por compromiso o simplemente porque deseas decir gracias a través de un detalle, lo cierto es que hay siempre una razón.
Por lo menos para mí tiene un gran significado, cuando me toca ir a un cumpleaños y tengo la seguridad de que si voy; me enfoco en la persona, su edad, forma de ser y gustos si se tratara de alguien que conozca bien. Me dedico a buscar un regalo pensado en ella y no en mí, es decir, que sea de su agrado.
Me caracterizo por ser muy detallista, no tengo como prioridad que tenga que ser algo muy costoso para impresionar, si no, que dedico tiempo a elegir algo único, que se adapte a mi presupuesto y para quien es. Envolver un regalo es un tema muy importante porque la forma, el color, el papel, la bolsa o la caja y la tarjeta son los que realmente darán la primera impresión porque se observara la dedicación que se le puso.
Claro, puede ser que hay personas que ni se fijan en los detalles o como algunos niños que rompen todo y lo abren desesperadamente, se entiende que nunca recodaran como estaba envuelto. Yo aprecio siempre hermosas presentaciones, sobre todo cuando hay presente alguna manualidad o donde es notable que dedicaron tiempo en hacer algo con sus propias manos; en definitiva agradezco en gran manera cuando alguien me da un regalo y me sorprende.
No siempre es solo por cumpleaños que se dan regalos, también es en navidad, por algún aniversario o fecha especial, a las maestras cuando termina el año escolar, por ejemplo, día de reyes magos y como en mi caso que a los que amo los llenos constantemente de detalles. La foto que les comparto es uno que envolví el año pasado para mi hija mayor por su cumpleaños, encontré ese hermoso papel en una librería y fue amor a primera vista con pequeñas imágenes vintage, lo convine con un lazo fucsia que quedo muy bien con el color.
Indiscutiblemente, logre hacer a mi hija muy feliz y sí, ella detalló el papel, no lo quería romper y lo abrió con mucho cuidado, todavía lo tiene guardado. Otra cosa que hago antes de la envoltura externa o si fuera una bolsa, envuelvo primero en papel de seda lo que haya comprado muy cuidadosamente, de un color que quede en armonía con todo lo demás.
Tal vez sea alguna rareza más de mi forma de ser, pero adoro elegir y envolver un regalo.

