Para relajarse, para divertirse, para huir del calor sofocante. Días para pelearse con las olas, para sentir el tacto de la arena fina en los pies y la brisa marina erizándonos la piel. Una infinidad de tonos azules y ocres, colores fríos y cálidos en contraste para pintar, a la sombra, al tiempo que se disfruta de una cerveza bien fría .