Un breve relato sobre una sociedad futurista aparentemente utópica, que esconde en sus raíces un exterminio más típico de una distopía, donde el tiempo se mantiene estático.
La distopia utópica
Te levantas a las 10 am, es un día soleado, vives en una sociedad futurista utópica; los medios de producción han alcanzado un grado de automatización que no requieren de labor humana, la ciencia ha alcanzado un cumulo de información suficiente como para predecir y explicar cualquier fenómeno. Hemos conquistado la inmortalidad biológica, no es inusual encontrarse con personas de más de 15000 años; tanto tiempo ha pasado que la creación artística se limita a ciclos reiterativos de creaciones pasadas, difícilmente se puede crear algo que no induzca la frase “deja vu”. Nadie esta hambriento y nadie tiene limitado acceso a la educación o a la salud.
Te sientes insatisfecho con tu vida y te fijas como objetivo tener un impacto significativo en la sociedad, en la ciencia o en el arte; que tu vida no transcurra como un simple complacer de placeres hedónicos. En ese momento, te percatas de que no hay progreso posible; nada que innovar, nada que explorar, nada que crear, nada que aspirar. Llega hacia ti la súbita realización de que en nuestra incesante búsqueda de mejorar nuestra situación presente, hemos llegado a un punto álgido en el cual el tiempo se ha detenido. No hay diferencia entre un antes y un después, todo es igual y continuara siendo estático hasta la muerte del universo, cuando la justicia térmica de la entropía lo equilibre todo, incluido el tiempo. Nuestra mejor idea utópica implica la erradicación de los soñadores, de aquellos con ojos en el futuro.
Relato creado para participar en el siguiente concurso: https://steemit.com/spanish/@trenz/concurso-de-microrrelatos-de-ciencia-ficcion-microcifi256-semana-6-el-dia-que-el-tiempo-se-detuvo