Da gracias porque a tu puerta,
no llega el hambre a desgarrarte
las entrañas
Da gracias por la Luz morando en
tu alma, inmune al vicio,
indiferente a la corrupción
Da gracias porque tu verbo es
la Verdad, no perfidia bien
parecida
Da gracias porque la Muerte y la
Desgracia, no te arrebatan a
quienes amas
Da gracias porque la cólera
del prepotente, la envidia del
mediocre, la charlatanería del
pícaro, no te aleja de la
senda de tus sueños
Sed agradecidos, amigos míos,
porque la Fortuna es una niña
que se aburre de lo bueno
y se divierte en lo trágico
Tened el agradecimiento como
un lazo, para domar la malcriadez
de la Fortuna
Recordad que somos endebles
juguetes de las deidades mortales,
soñando con quebrar nuestras cadenas…
Sed libres como la pluma
llevada por el viento.
Sed luminosos como rayo
de luz derrotando a malévolas
sombras.