La abejita está apurada.
sabe que no es una reina
que debe trabajar duro fuera de casa
y que al regresar aún le espera una dura faena.
En la mañana recorre el mercado.
Todo debe ser fresco, de primera:
un polen terso, fresco, abrillantado
un néctar delicioso, viscoso, ambarino, puro.
A veces hay que sumergirse toda.
Las flores pueden ser mezquinas,
interesadas, tendenciosas, caprichosas
capaces de hacer trampas, sugestivas.
La abeja esta cansada,
antes ha sido limpiadora, niñera
conserje, constructora, almacenista.
La abeja no pregunta por qué no nació macho.
Es sabia, sabe que su función es mucho mas compleja,
que incluye los dulzores del mundo y sus aromas.
Las frutas más vistosas sin ellas no existieran
y nuestro planeta sería un lugar muy triste sin su existencia.
Todas las fotografías son propias, tomadas en una mata de granadas, bajo el cielo fantástico de Cumaná, mi ciudad idealizada.
Que lindo @gracielaacevedo, tus fotos preciosas y el mensaje... diste en el clavo con el ultimo comentario de ciudad idealizada acabo de darme cuenta que es la definición que buscaba para entender mi lucha de sentimientos hacia ella.
Gracias, @evagavilan. El mundo es de una belleza fascinante, sobre todo el pequeño mundo desconocido.
También vivo la ambivalencia de mi sentimiento hacia la ciudad. Resuelvo por el amor, sin llegar a la ceguera.
Maravillosa historia contada con mucha gracia y sabiduría, @gracielaacevedo.
Tres reinas de un mismo reino sobre esta tierra: tú, la abeja y la granada.
Bella. Te abrazo.
Gracias por ese desgranaje de bondad y dulzura @oacevedo. Te amo