Los problemas son muy reales y pueden ser abrumadores. Sin embargo, debemos recordar que nuestra felicidad depende de nuestra perspectiva y no de nuestras circunstancias. Los problemas pueden hacernos sentir impotentes y derrotados, pero podemos controlar nuestra perspectiva. Todavía podemos elegir ser felices.
Separarse de sus problemas
Cuanto más te enfocas en tus problemas, más magnificados se vuelven. Los pensamientos negativos conducen a sentimientos negativos como la ira y la depresión que agotan tu energía y te impiden estar en el momento presente.
En lugar de permitir que los pensamientos dañinos se desarrollen y crezcan en fuerza, encuentre un lugar tranquilo y pacífico. Piensa en tus problemas y luego hazlos a un lado con fuerza.
Si los problemas comienzan a aparecer nuevamente en su cabeza, obligalos a salir nuevamente. Con la práctica podrás crear un lugar sereno en tu mente que te permita escapar de los pensamientos y sentimientos estresantes.
Hacer algo creativo
La investigación ha demostrado que existe un fuerte vínculo entre la creatividad y una mejor salud mental.
Me encanta leer, pero cuando estoy realmente estresad@, nada me calma como el enfoque y la concentración que requiere la escritura. Tal vez te encanta cantar o pintar. En lugar de preocuparte por tus problemas, haga algo creativo y se verá obligado a mirar hacia adentro y escucharse a sí mismo. Le ayudará a cerrar el mundo y sus problemas por un tiempo.
De hecho, si se toma el tiempo para ser creativo, estará más feliz, menos estresado, más resistente y mejor equipado para resolver problemas frente a las dificultades.
Oblígate a pensar pensamientos felices
Dirige deliberadamente tu mente para enfocarte en las cosas que te hacen sentir feliz.
Puede recordar algo gracioso que hizo o dijo su nieto, pensar uno de sus recuerdos favoritos o planificar un viaje para el futuro.
O escriba cinco razones por las que puede sentirse agradecido y obligarse a concentrarse en esas cosas. Pon citas inspiradoras y felices en las notas y publícalas por toda la casa.
Una vez más, con un poco de práctica puedes entrenar tu mente para gravitar naturalmente hacia pensamientos más agradables.
Por supuesto, estos consejos no harán que tus problemas desaparezcan, pero pueden ayudarlo a enfrentar mejor los desafíos.