La resiliencia, se refiere a la capacidad de hacer frente a lo que sea que la vida te depare. Algunas personas son derribadas por los desafíos, pero regresan como una persona más fuerte, más firme que antes.
Llamamos a estas personas resistentes.
Una persona resiliente trabaja a través de los desafíos mediante el uso de recursos personales, fortalezas y otras capacidades positivas del capital psicológico como la esperanza, el optimismo y la autoeficacia .
La superación de una crisis a través de la resiliencia a menudo se describe como "recuperarse" a un estado normal de funcionamiento. Ser resistente también se asocia positivamente con la felicidad.
Las relaciones juegan un papel vital en la construcción de la capacidad de recuperación de un individuo. Esto comienza a una edad temprana cuando estamos fuertemente influenciados por nuestros tutores y padres.
Los niños más resistentes tienden a ser criados con un estilo de crianza autoritario, en lugar de estilos de crianza pasivos.
El estilo de crianza autoritario muestra las cualidades de calidez y afecto que también proporcionan estructura y apoyo al niño, por qué la crianza autoritaria es el enfoque ideal para criar a un individuo bien redondeado, independiente, autosuficiente y autocontrolado.
Oponerse a esto puede resultar en niños rebeldes o dependientes que experimentan desconfianza frecuente y, por lo tanto, tienden a retirarse de los demás.
El nivel educativo de los padres, el estado socioeconómico y el entorno familiar (organizado versus desorganizado) influyen como fuertes influencias en el desarrollo de la capacidad de recuperación psicológica de un niño. Cuando se producen relaciones positivas, se valoran los comportamientos bien ajustados y respetuosos de las reglas; Estos influyen fuertes efectos positivos en los niveles de resiliencia.
Las características de la resiliencia incluyen habilidades cognitivas, diferencias de personalidad, capacidad de resolución de problemas, autorregulación y adaptabilidad al estrés. En las relaciones tempranas y los entornos de apoyo, los niños pueden desarrollar herramientas que inconscientemente desarrollen su capacidad de recuperación psicológica y las habilidades mencionadas.
