Un saludo cordial a todos los miembros de la prestigiosa comunidad HIVE.
El tiempo, inexorable, a veces nos deja experiencias de vida, que son maravillosas.
Ver el empeño que ponen los padres venezolanos para sacar adelante a sus hijos, educándolos, y dándoles responsabilidades que uno creería que no pueden afrontar, es sorprendente.
Mi comadre Yeli, con sus hijos Nixon Miguel y Ana Karina.
Mis compadres Nixon Jiménez y Yeli Rosendo, con sus hijos Nixon Miguel y Ana Karina.
Desde muy jovencitos, los sobrinos de mi esposa empezaron a demostrar lo que serían en un futuro no muy lejano.
Mi sobrino político, Nixon Miguel, durante sus inicios en las artes marciales.
Pronto dominaron el lenguaje y se expresaban como adultos.
Las matemáticas, la lectura y escritura no les fue difícil.
A estas actividades, que para los que tenemos más de sesenta años eran proezas académicas, se unió el manejo de distintos medios tecnológicos que la mayoría conocimos en la década de los años noventa, materializados en aquellos enormes celulares, que mal llamábamos “bloques”.
Nixon Miguel, compartiendo una entrevista radial, con la Lic Nancy Machado. por Onda 104. 5 F.M.
Pronto despuntaron en el liceo, y de allí, recorrer con soltura la carrera universitaria fue solo un paso.
La primera camada de sobrinos se hizo notar rápidamente.
Unos escogieron las ciencias agronómicas y llegaron a niveles académicos muy altos.
Mi compadre Dr. Nixon Jiménez, docente del post grado de la UCLA, en Barquisimeto, junto a su hijo Nixon Miguel.
Otros tomaron la medicina veterinaria y también tuvieron éxito.
Los más creativos, se desarrollaron a nivel público, como administradores, contadores y en emprendimientos comerciales.
Mi ahijada Lic. Neddi Jiménez de Pérez y su hija Miranda.
Mientras que otros destacan como ingenieros, en diversas áreas.
Mis compadres Juan Félix Pérez y Rosa Asuaje, con sus hija Maria Alejandra y mi ahijado Féliz Alejandro.
Los más osados, despuntaron de manera importante, en el área comercial.
Mi sobrino político Nelson Javier Pérez, su esposa Luzdary Pinzón y su hijo Cristian.
Otros comparten su vida laboral cotidiana, recreándonos con sus dotes artísticas.
Mi ahijado Juan Carlos Pérez, excelente interprete de música llanera.
De ese primer grupo de sobrinos, uno debió emigrar a España, en busca de mejores derroteros, para él, su esposa y sus dos hijas.
José Daniel Castellano Pérez, su esposa Karina, y sus hijas Natalia y Julieta.
Hasta ahora, les ha ido muy bien, gracias a DIOS.
Nos damos cuenta que estamos envejeciendo muy rápido, cuando notamos que ese primer grupo de sobrinos, ya trajo semillas a este mundo y cada uno de esos chamos, ha seguido el rumbo de sus progenitores, teniendo visos de que los van a superar en todos los aspectos positivos.
Mi sobrina política Norma Rosa Jiménez y su hija María Teresa.
Mi sobrino político Nixon Miguel con su mamá, mi comadre Yeli Rosendo.
Ya se ha hecho noticia conocida en todo el mundo, la oleada de migrantes venezolanos, por razones de Uds., conocidas, pero es necesario destacar que no todos salen de Venezuela, huyendo de la barbarie que nos quiere someter.
Uno de los más destacados sobrinos de mi esposa, de la segunda camada, ha partido hoy, rumbo a Francia, con una beca que le permitirá afianzar en ese importante bastión europeo, sus conocimientos del idioma galo, que con toda seguridad le va a abrir las puertas de ese otro mundo, que existe más allá del océano atlántico.
Nixon Miguel en París, Francia. "Gare du Nord" (En la estación del norte).
Su vuelo hizo escala en Cancún, México, desde donde nos envió unas lindas imágenes.
En una calle de Cancún, guardando las debidas medidas de protección por la COVID-19.
Artesanía mexicana muy actual.
Desde muy chico, nuestro sobrino Nixon Miguel, despuntó en actividades académicas.
Nixon Miguel, con mi comadre Ana Rosa Pérez.
Siendo muy joven, realizó estudios musicales de guitarra.
Destacó en las artes marciales, donde alcanzó la cinta negra.
Ha dedicado buena parte de su tiempo al estudio de los idiomas inglés y francés, los cuales domina con bastante fluidez.
Sus estudios de medicina, en la Universidad Centro Occidental Lisandro Alvarado (UCLA), están bastante adelantados, los cuales retomará una vez que retorne a Venezuela, después de su pasantía de un año por Europa.
Uno de sus últimos proyectos ha sido un emprendimiento comercial, junto a su hermana Ana Karina, conocido “@Wanderlust: Carpetas universitarias”, con un área de influencia nacional.
Ver la seriedad con la que jóvenes como Nixon Miguel, afrontan la vida, nos reconforta y nos da la garantía de que el futuro de Venezuela va a quedar en muy buenas manos.
Ese es el tipo de experiencias que todos queremos que se repitan en cada uno de nuestros muchachos venezolanos, para que la patria no se pierda del rumbo que traía hace unas dos décadas atrás, y que, por cosas de la política y la pervertida corrupción e impunidad, se nos ha extraviado, a tal punto, que hoy somos tema lamentable de conversación, en muchos lugares del mundo.
Aprovecho esta grandiosa plataforma que es HIVE, para expresar mi satisfacción por el desempeño de la mayoría de nuestros jóvenes venezolanos, que día a día, van asumiendo el compromiso fundamental, de convertirse en la generación de relevo y faro que guíe el desarrollo de Venezuela.
A caballo, Nixon Miguel, acompañando a mis compadres, su tío Gilberto Pérez y su abuelo Miguel Jiménez.
Feliz y productivo viaje, Nixon Miguel.
Ana Karina, Nixon Miguel y mi ahijado José David Castellano Pérez.
Ali Riera
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