Interesante tema. A mi no me gusta mucho usar la etiqueta "niño", visualizo estas primeras etapas de nuestras vidas como el tiempo del comienzo de la construcción del mundo experiencial que formará lo que seremos. Pero se que en esos primeros años de nuestra existencia después de ese parto hacia la vida, nuestras primeras experiencias están relacionadas con eso que constituye nuestro cuerpo; piernas y manos (agarre y caminar), piel y sensibilidad, vista y gusto. Quizás nuestro intento por "enseñar" a conformar las experiencias de ese "niño" que recién comienza debería estar encaminado hacia apoyarlo a que maneje con destreza su manera de andar, de agarrar, de respirar... En realidad deberíamos comprender que sobre nuestros hombros comienza a construirse el futuro.
Muchas gracias!