Análisis Inconográfico "La Última Cena De Signorelli"

[hikarineko]

Título: La Última Cena
Autor: Luca Signorelli
Año: 1502

Significación Primaria:
La obra posee una línea bien definida en primera estancia se observa un grupo de personas ejecutando una escena donde los tonos se prestan verdosos en las túnicas de algunos personajes junto con los tonos rojizos que completan algunas vestimentas y crema con mayor fuerza de presencia en la obra, nótese también como solo tres personajes poseen tonos morados generando especial realce en ellos, conseguiremos objetos de forma bidimensional de uso personal esparcidos por lo que es el objeto mas grande que seria el mesón en forma de “c” donde se encuentran reunidos los personajes la cual posee un extenso mantel blanco que posee matices crema, en esta pieza la luz es tenue pero que permite la apreciación de la misma obra donde solo se observa el juego de las sombras entre los pliegues de la vestimenta y en los rostros de cada uno de ellos.

El ambiente de la obra se desarrolla en la ansiedad y confusión, observamos como cada uno de los sujetos se encuentran comunicándose unos con los otros existiendo mucha inquietud observamos como el personaje del centro posee a otro sujeto reposando en su lecho generando una sensación de intento de consuelo y tristeza mientras que el personaje que da la espalda muestra signos de enojo e ira que contrasta toda la escena que los demás sujetos comparten.

Contenido Secundario:
Observamos también como el mantel blanco hace punto de enfoque y nos presenta un recorrido visual por toda la obra el cual se nos interrumpe por el sujeto que se encuentra en el plano principal, en el mesón observamos platos servidos con carne, panes picados y regados alrededor de la tabla y la ausencia de copas que son en esta obra vasos que al parecer son de arcilla servidos con lo que parece vino y unas peculiares jarras que poseer una forma ornamental. Observamos pues a uno de los personajes que posee un objeto punzante (cuchillo) cuya trayectoria es para arriba y un tanto al frente con la hoja del lado hacia fuera.

Encontramos también la presencia de aureolas las cuales distinguen a los personajes pero uno de ellos no la posee, si contar que la aureola se puede apreciar como una delgada línea en una tonalidad clara que simula a la luz que esta desprende demostrando la santidad de aquellos que se encuentran a lado de su salvador y que aquel que lo traicione no podrá ser venerado.

La aureola (según el diccionario iconográfico de Alfonso Serbano) en la imagen solar que posee el sentido de corona se manifiesta como un resplandor por enzima de los rostros de las personas que los poseen, indica el grado de santidad y de la conexión con lo divino, se utiliza dentro de las obras para valorizar y dar nobleza a un personaje que en la mayoría de los casos son enviados santos, el hijo de dios, ángeles o la presencia de la vírgenes, inocentes o mártires de las puestas escénicas.

Sandalia. La sandalia es, como lo diría Segalen, lo interpuesto entre el suelo de la tierra y el cuerpo pesado y vivo: de ahí la importancia del simbolismo de las sandalias depositadas, rito masónico que evoca la actitud de Moisés en el Sinaí, tomando contacto descalzo con la tierra santa. El hecho de sacarse la sandalia y dársela al socio era para los hebreos la fianza de un contrato

Vino: Aparte de interpretaciones particulares, como la de san Bernardo, que no ve en él más que el temor y la fuerza, el vino está casi siempre asociado a la ~ sangre, tanto por el color como por su carácter de esencia de la planta: es en consecuencia el elixir de vida o de inmortalidad. Particularmente -pero no exclusivamente- en las tradiciones de origen semítico, es además el símbolo del conocimiento y de la iniciación. En razón de la ~ embriaguez que provoca. En el taoísmo la virtud del vino no se distingue del poder de la embriaguez.

En la Grecia antigua el vino substituía la sangre de Dionisos y representaba el licor de Inmortalidad. Éste es también su papel en el taoísmo, en donde es objeto de una preparación ritual compleja. En las sociedades secretas chinas el vino (de arroz) se mezcla con la sangre en el juramento, y como bebida de comunión permite alcanzar la edad de ciento noventa y nueve años. Ésta es también, por supuesto, la significación del cáliz de la sangre de Cristo en la eucaristía, prefigurada por el sacrificio de Melquisedec. Aparece igualmente aquí la noción de sacrificio
Asociada a la efusión de la sangre, sacrificio que puede ser al mismo tiempo el de las tendencias pasionales asociadas a la embriaguez. El vino es elemento de sacrificio entre los hebreos.

En la tradición bíblica el vino es en primer lugar signo y símbolo de alegría (Sal 104,15; Ecl9, 7) y, por generalización, de todos los dones que Dios hace a los hombres

Cuchillo: Se ha visto, a propósito del cincel, el simbolismo general de los instrumentos cortantes, que se aplica plenamente aquí: es el principio activo modificando la materia pasiva. La importancia de este simbolismo varía, El simbolismo del cuchillo va frecuentemente asociado a la idea de ejecución judicial, de muerte, de venganza, de sacrificio (la mano armada de Abraham en el sacrificio de Isaac). El cuchillo es el instrumento esencial de los sacrificios. Un cuchillo de hoja corta sugeriría más bien las pulsiones instintivas del hombre, mientras que la hoja larga evocaría la nobleza y la altura espiritual de quien lleva la espada. Existen cuchillos neolíticos de hueso, sílex u obsidiana, cuyo uso ha sobrevivido entre ciertos pueblos para las ceremonias y sacrificios rituales, mucho después de que hubieran sido remplazados por cuchillos de hierro para los usos profanos.

Significado Intrínsico:

Esta obra trata sobre la famosísima Ultima Cena del pintor Signorelli de la edad del renacimiento, donde se muestra lo que Jesús compartió junto con sus apóstoles antes de que fuese crucificado la obra detalla el instante en que los apóstoles se enteran que Jesús será traicionado, la obra posee a trece personajes donde fácilmente es reconocible Jesús Cristo y el antagonista de la pieza que seria Judas Iscariote.

Luca d'Egidio di Ventura de Signorelli conocido como Luca Signorelli o Luca da Signorelli (Cortona, 1445- 1523) fue un pintor cuatrocentista italiano. Hijo del pintor Gilio di Luca di Ventura Signorelli y Bartolomea di Domenico di Schiffo, su vida se relata a través de una larga investigación de la vida de Girolamo Mancini. Se trata de uno de los grandes maestros de la llamada Escuela de Umbría. Aventajado discípulo de Piero de la Francesca del que aprendió su tratamiento de la perspectiva, mientras que su pericia en el dibujo de la anatomía se debe al influjo de Antonio del Pollaiuolo.

Completó su formación con breves estadías en Florencia. Al interesarse por el arte florentino pronto se diferenció de Piero della Francesca merced a su capacidad de plasmar el movimiento.

Signorelli ya desde sus obras juveniles presenta un lenguaje original que a la serena espacialidad pierfrancescana aúna el vibrante dinamismo lineal de Pollaiolo y del Verrocchio, como se puede observar en el estandarte procesional de la Flagelación de Cristo, c. 1475, Brera.

Aún más, al marchar a Roma en 1482, trabajó en la realización de parte de los frescos de la Capilla Sixtina (particularmente las partes dedicadas al Testamento y a la Muerte de Moisés). Es en esa época cuando se nota el paso a una madurez en la realización de Signorelli, máxime cuando produce obras que se incluyen entre las mayores exponentes del intelectualismo florentino derivado de la escuela neoplatónica de Marsilio Ficino; es así que en las obras de Signorelli (como en la de Leonardo entre otros) se encuentran complejas referencias simbólicas y literarias que son exaltadas mediante una soberbia estructuración espacial, una opulenta elaboración cromática y un consecuente relieve pleno de plasticidad en las figuras por él diseñadas.

Su especial libertad en el modo para tratar los temas, la especial utilización de los efectos lumínicos así como el dramatismo de muchas de sus composiciones le confieren a su obra un elevado valor dentro del Renacimiento.

Tras su estadía en Roma, ya de regreso a su ciudad natal, puede decirse que Signorelli realiza las primeras obras de su madurez, caracterizadas por las formas angulosas, los colores intensos y un especial talento dramático en el uso de la luz.

Dejo atrás su estilo para ir hacia el ambiente florentino. Muchos de sus trabajos fueron perdidos o quemados conjunto a los registros de la vida de este artista.

Uno de los artistas influenciantes, su amigo artista Perullino, quien tenía un taller en Florencia- Italia, país de nacimiento de Lucas di Signorelli. No solo se dio a conocer por sus pinturas, sino también por sus esculturas icnográficas como la escultura de las puertas de la sacristía de San Lorenzo, motivo de inspiración para otros artistas italianos.

Su estilo posee una gran tensión que se hace evidente en la tendencia de las figuras a trascender el límite de la perspectiva que señala el marco de la obra -que se observa especialmente en la Adoración de los Reyes Magos y en el San Sebastián-. Esta tensión se patentiza aún más en sus frescos.

De este modo, entre 1484 y 1490 Sigorelli realizó numerosas obras de composición cada vez más compleja, siendo culminante su arte en su desempeño como fresquista. Sus grandiosos ciclos comenzaron por la abadía del Monte Oliveto Maggiore (allí trabajó en colaboración con il Sodoma), en las escenas de la Vida de san Benito abad.

Desde el monasterio de Monte Oliveto Maggiore cerca de Siena, Signorelli marchó a Orvieto donde produjo su obra maestra, los frescos en la capilla de S. Brizio (entonces llamada la Cappella Nuova), en la catedral. Las obras de Signorelli en las bóvedas y en las paredes superiores representan los acontecimientos referidos al Apocalipsis y el Juicio Final. Las escenas comienzan con la Predicación del Anticristo, y pasó al Día del Juicio Final y La resurrección de la carne. Ocupan tres vastos lunetos, cada uno de ellos con una única composición narrativa continua. En una de ellas, el Anticristo, después de sus portentos e impías glorias, cae de cabeza desde el cielo, cayendo en una multitud de hombres y mujeres. Los acontecimientos del Juicio Final llenan la bóveda y las paredes alrededor del altar: Paraíso, los Elegidos y los Condenados, el Infierno, la Resurrección de los muertos y la Destrucción de los réprobos.

La Ultima Cena, es una escena que transcurre en el momento que según el texto bíblico le dice a sus amados discípulos que uno de ellos lo vendería, generando revuelo y discrepancias generando la pregunta de “¿Quién será el traidor?”, vemos a Pedro quien posee el cuchillo a manera de sentenciar, enjuiciar y con carácter de proteger a su maestro, en otra parte de la mesa existe un cuchillo inclinado con la hoja hacia adentro que podría significar la unión de lazos según el significado de el símbolo.

Ésta fue pintada por Luca Signorelli bajo la influencia de la edad media durante el contrato del vaticano con otros artistas, una obra netamente religiosa, basada en los evangelios de Lucas, Juan, mateo y marcos, del nuevo testamento pintado en el país del artista natal, debido a las peticiones que ocurrieron dentro de la institución religiosa, quizás el motivo mas obvio de la realización de esta obra es el echo que por su creencia católica apostólica romana mas que le pagasen por realizar obras para los museos del vaticano diesen la motivación requerida para completar esta obra, independientemente de la influencia que los otros artistas ejerciesen sobre él ya que este marco una época junto a sus obras en la historia renacentista y religiosa.