Historia de un esguince, de ser independiente a la dependencia (retos que no parecen retos).

in #spanish6 years ago
¿Qué conocen ustedes por esguince? Seguro lo conocen como una especie de torcedura y ya, es decir, la palabra es hasta bonita, “esguince”, suena delicado y todo, superficial. En mi caso, yo lo llamaría a lo venezolano “esguace”, porque literalmente es esguazarse los ligamentos. A mí me hablaban de un esguince y no imaginaba nada doloroso, es decir, ¿Cómo una palabra tan bonita puede ser dolorosa? hasta el 29 de Junio del presente año.

IMG-20180707-WA0015.jpg

Esa semana del 29 de Junio se convirtió poco a poco en una semana algo pesada con muchas tareas de por medio, era el II Congreso Científico Internacional de Estudiantes de Medicina, Curso Regional Zona C FELSOCEM, SOCIEM UDO Bolívar (del cual hablare en otro post). La semana siguiente tenía parciales, entre otros pendientes ¿Por qué hablo del II CCIEM? Era parte de logística y protocolo, y en lo que a mí respecta, cuando me comprometo con algo no me gusta faltar a mi palabra.

IMG-20180707-WA0014.jpg

Ese día aproximadamente a las 5 am suena mi celular, era mi vecina diciendo que había dejado sus llaves y que necesitaba las que tenía de repuesto suyas, le dije que me avisará cuando estuviera llegando y bajaba (vivo en un primero piso), tenía tanto sueño que solo caminaba por inercia, ya al final de las escaleras, creí que no faltaba ningún escalón y cerré los ojos mientras adelantaba mi pie izquierdo (no cierren los ojos mientras bajan escaleras) y fue ahí cuando caí, claro, no hizo falta más para que mi sueño huyera dejando un dolor insoportable en el tobillo, como pude logre levantarme y llegar hasta la puerta, mi vecina me ayudo a subir hasta mi casa, me dejo en mi cama y yo pensando en el congreso me tome unos 600 mg de ibuprofeno para dormir dos horas y dirigirme al teatro donde este se había estado efectuando.

IMG-20180707-WA0016.jpg

IMG-20180707-WA0023.jpg

Les digo con sinceridad, ahora mientras estoy tirada en mi cama, no sé cómo hice para levantarme ese día, tomar un bus y caminar unas dos cuadras con el tobillo así. Esa mañana estaba nublada (que dramático todo) y rogaba que no comenzara a llover, cayeron unas cuantas gotas pero logre estar dentro del teatro antes que las nubes se desahogaran totalmente.

IMG-20180707-WA0019.jpg

Cuando llegue comente lo sucedido por lo que me dejaron a cargo de recibir a las personas y anotarlos en la asistencia para que no tuviera que moverme tanto. Durante la mañana tuve que subir las escaleras en unas tres ocasiones. Me consiguieron más analgésicos y ya en algún momento el dolor era soportable de nuevo, hasta llego a pasar desapercibido. Ese día hice lo que no se debe hacer (como diría un amigo) estaba “haciendo lo malo” que en este caso era caminar bastante, subir escaleras, me falto correr y andar en tacones jaja.

Ya acabada la larga jornada del congreso todos se dirigían a un lugar llamado “Tragos gastro bar”, para celebrar que todo había salido bien. Yo en mi condición no me atrevía a ir, a parte debía volver a estudiar. Pero como uno siempre se deja llevar por la mala junta, y queriendo celebrar lo bueno con todos (porque un evento así no acurre todos los días) termine yendo con ellos, no sin que antes me insistieran un poco y me dijeran que me podía quedar sentada toda la noche (cosa que no me dejaron del todo).

IMG-20180707-WA0017.jpg

¿Qué pasó esa noche? Sí, estuve sentada, por lo menos la gran parte de la noche, pero un compañero me saco a bailar (solo soporte una canción o menos) y aparte de eso, un poco antes, tuve que cantar karaoke (ahí comprobé una vez más que canto fatal). La verdad es que fue una noche bien animada y a pesar de todo no me arrepiento en lo absoluto de haber ido. El problema se iba a presentar al otro día cuando me diera cuenta al levantarme que apenas podía caminar, me tome la caída demasiado a la ligera.

IMG-20180707-WA0028.jpg

El día anterior durante el congreso un amigo me había visto caminar tan mal que me ofreció una venda para inmovilizar mi pie. A penas pude robar algo de WiFi en la ventana le escribí y él inmediatamente vino hasta mi casa (a pesar de que vivimos de polo a polo en la Ciudad) a traerla. Creo que a pesar de todas las desventuras que puedan pasarme soy una persona bastante afortunada, el día anterior había llegado mi prima aquí a quedarse hasta el lunes, así que por lo menos durante el domingo tuve ayuda suficiente. Pero tenía que enviar algunas tareas por correo y tuve que caminar (una vez más) hasta el otro edificio para poder enviarlas.

IMG-20180707-WA0033.jpg

IMG-20180707-WA0034.jpg

Ese día conocí a un par de gatitos recién nacidos que rescato mi vecina (@AstridIsla ) y ha estado cuidando, a uno ya le consiguió hogar, el otro todavía está aquí con ella.

Hablemos del lunes. El lunes era mi parcial de farmacología al cual por nada del mundo me atrevía a faltar. Y como para retarme un poco más el universo, a la hora que me iba, comienza a llover fuertemente. Para irle un poco más en contra al universo agarre una bolsa y envolví mi pie para no mojarme la venda (para que vean que cuando quiero hacer algo lucho hasta el final). Esa vez no me tocaba agarrar bus (eso si hubiera sido un poco más heavy), mi hermano me llevo hasta la universidad. Y así fui, entre cojeando y subiendo las escaleras de a pasito, que llegue a mi parcial, el Doctor apenas me vio me pregunto “¿Estas accidentada?” ¿Qué otra cosa podía hacer que tomármelo con gracia, reírme y decirle que si?

  • ¿Y qué pasó el martes Janni?

  • El martes mi hermano y su novia me llevaron al hospital, donde si hubiera decidido ir a clases tenía que subir 7 pisos, pero no, esa vez iba como paciente. Me indicaron realizarme una radiografía de tobillo, cosa que no fue posible ese día, porque estamos en Venezuela y aquí gran parte de los servicios públicos están en decadencia.

  • Ajá ¿y no tenías dinero para hacerte una Rx en un lugar privado?

  • No, tenía 1.600.000 en mi cuenta y si una Coca Cola cuesta 2.100.000 dudo que una radiografía cueste menos.

  • Ah ok, ¿qué hiciste entonces?

  • Espere al otro día que venían mis padres, pensé que llegarían temprano y me llevarían en la mañana a hacerme la radiografía pero se quedaron accidentados y llegaron como a la 1 pm. Ya yo estaba en un curso en ese momento (sí, soy muy terca). Para mi suerte (ya les dije que soy una persona muy afortunada) llego a saludar al Doctor que estaba dictando el curso un Traumatólogo. Obviamente le pedí el favor de que me revisara el tobillo – suelto un suspiro – me dijo que era un esguince severo y que tenía que haberme enyesado pero que ya había pasado mucho tiempo así que solo me mando analgésicos y antiinflamatorios, a meter mi pie en agua tibia con bastante sal y a mantener reposo (cosa que no había hecho en lo que iba de semana prácticamente).

  • ¿Lo hiciste?

    IMG-20180707-WA0026.jpg

  • Claro, mis padres me fueron a buscar después del curso, compraron las medicinas y pasamos buscando una tobillera que me había ofrecido una amiga.

Esa noche hice lo que me indico el médico ¿qué más hice? Creo que es una costumbre venezolana, mi madre comenzó a insistir para que la dejara echarme mantequilla con sal en el tobillo. Le dije que no, que no y que no, pero las madres siempre se salen con la suya (o casi siempre). Para muestra una foto.

IMG-20180707-WA0024.jpg

Ese mismo día me informaron que tenía guardia en el IVSS (Instituto Venezolano de Seguro Social) al otro día (es decir, el 5 de Julio, día de la independencia en Venezuela), en honor a ese día y a mi cojera, hice un tweet que cito a continuación “El día de la independencia soy más dependiente que nunca”.

IMG-20180707-WA0025.jpg

No miento para nada, todo ha sido un “agárrame aquí, tráeme esto, ayúdame aquí, puedes por favor”. Para mí, eso ha sido lo más frustrante de todo este proceso, nunca me ha gustado tener que depender de los demás, pedir demasiados favores y menos en cosas tan sencillas. Siempre he sido la persona que dice “tengo dos pies, dos manos y un cerebro que funciona muy bien, y si es así, puedo hacer cualquier cosa”.

IMG-20180707-WA0029.jpg

Hay algo de lo que siempre me he sentido orgullosa, y es esa capacidad de independencia, de no necesitar ayuda, y se me atraganta el orgullo cada vez que tengo que pedirle un favor a alguien, sobre todo si es alguien a quien no considero cercano. El hecho de escucharme decir internamente “necesito que me ayuden a…” ha sido como una bola demoledora a gran parte de mi dignidad, mi orgullo. Porque siempre he sido la que dice “yo puedo” “yo veo como hago” “yo resuelvo”, aunque no haga nada, aunque no resuelva nada, porque es mi problema y yo veo como me lo trago.

Mis padres se iban a quedar solo aquella noche y planeaban irse temprano al otro día, por lo que comenzaron una discusión sobre cómo me haría la radiografía, al final, ya cansada de escuchar aquello que no tenía ni pies ni cabeza les dije “váyanse temprano que yo veo como resuelvo, busco quien me lleve y ya”. Hubo un silencio, cada quien agarro por su lado en ese momento y al rato volvió mi madre para decirme que ellos me llevarían y que si se podían ir después, lo harían, de lo contrario se quedarían un día más. Esa noche el dolor fue tan fuerte que me desperté con un grito ahogado, por suerte mi madre no se despertó.

IMG-20180707-WA0022.jpg

Aquí está la foto de la protagonista de la pelea.

Espere que se hiciera la 1 pm para irme a la guardia, donde por suerte el médico residente al verme lisiada me dejo sentada casi toda la tarde, hasta que me dijo que iba a suturar y si quería ver que bajara. Pase más tiempo parada del que tenía estipulado porque en ese momento llegaron varios pacientes y el tiempo corrió más rápido de lo que había pasado en toda la tarde, hasta que llegó la hora de irnos a casa. Preparé comida y por segunda vez metí mi pie en agua tibia con sal.

IMG-20180707-WA0035.jpg

El viernes fue más fácil porque no tuve clases, no había ningún curso ni alguna razón por la que salir de casa, pero me estaba atacando la frustración que llevaba días aguantando. Ese día estaba sola, aunque igual no hubiera pedido algún favor y seguramente me encerraría en mi cuarto, pero ese día al verme sola, incapaz de dar un paso sin sentir dolor, incapaz de cocinar como una persona decente, incapaz de arreglar mi cuarto sin que significara un gran esfuerzo (esa mañana lo hice). Comencé a cuestionar al universo, claro que no es para siempre pero es duro ¿por qué me quitan una de las cosas que más valoro? Y entre la frustración y la rabia por ser tan torpe, comencé a llorar como tenía tiempo sin hacerlo.

IMG-20180707-WA0030.jpg

Una hora después de calmarme vino mi vecina a buscar leche para los gatitos, conversamos un rato y se fue. Luego llego otro amigo casi que a salvarme la vida de la depresión y comenzó a hablar las estupideces que siempre habla, trajo pan, estaba a punto de preparar la cena cuando recordé sus habilidades culinarias y le pedí que trajera mortadela y queso de la nevera, prepare los sándwiches mientras él hacía de mis pies para buscar las cosas y tostar los panes.

Y hoy mientras hago este post, es sábado, 07 de julio de 2018, son las 12:57 m. Me sigue doliendo el tobillo y sigo pensando que no sirvo para estar enferma porque me entrego demasiado a la situación. Sigo sin poder caminar y pienso que otra de las cosas que más me duele es que no podré hacer insanity por un buen tiempo, me planteo los posibles ejercicios que puedo hacer sin forzar el tobillo. Porque a pesar de que uno no pueda hacer una cosa, siempre existirán otras opciones “mientras tanto”, la cosa es buscarlas, tener la capacidad de verlas e ingeniárselas, porque la idea no es estancarse en un hueco, si no superarlo y seguir llevándole la contraria al universo porque como diríamos aquí en Venezuela “si él es arrecho, yo soy más arrecha todavía”.

IMG-20180707-WA0032.jpg

Y así culmina mi historia de como me hice un esguince y el proceso con este.

Sort:  

Chic article. I learned a lot of interesting and cognitive. I'm screwed up with you, I'll be glad to reciprocal subscription))

wow Amiga faltó mis conversaciones de aliento :) by @mar.milano