Necesitamos rescatar a Venezuela, sí, pero lamentablemente nuestras vidas no pueden ser rescatadas. Por muy buenas intenciones que tengamos, el narco gobierno seguirá destruyendo todas nuestras expectativas de cambio, y seguirá destruyendo a decenas de familias con las muertes de sus hijos y relativos.
No es pesimismo, es aceptar una cruel realidad, aceptar el hecho de que salir a la calle no es ya una opción. Las elecciones ya no son una opción. ¿Qué nos queda por hacer? parece que se acabaron todas nuestras posibles salidas y opciones, y quedó evidente que por nuestra propia cuenta, este gobierno no caerá. Necesitamos apoyo internacional, que los demás países intervengan, necesitamos un salvador extranjero, un libertador. Un gobierno que masacra su propio pueblo no tiene derecho a quedarse, así que ellos nos quitaron el derecho a decidir, nos quitaron el derecho a la vida, nos quitaron el derecho a la salud.
Por desgracia, la mitad del problema es la población venezolana es mediocre y conformista y la mentalidad del venezolano necesita un cambio, más que el cambio que Venezuela aclama. Sin se paso fundamental, no se conseguirá ningún resultado y estaremos destinados a morir a manos de un régimen asesino. Pensar que el cambio viene a Venezuela, es algo incluso ridículo de imaginar. Algún día esto cambiará, o tal vez no lo haga, pero las personas no pierden la fé, tanto así que mueren con ella. Nada de esto es justo, ningún inocente merecía morir, ninguna de las cientos de muertes por protestas fue realmente justificada y necesaria, y ahora la gente tiene miedo, y razones tienen.
Nos enfrentamos al mayor reto de toda nuestra historia, y de toda la historia de Venezuela en casi veinte años; así que nos toca aguantar, seguir resistiendo, luchando y demostrando que, a pesar de todo, los venezolanos somos unos supervivientes, que merecen tener la atención de la vista internacional y dejar finalmente de ser ignorados y echados a un lado por el resto de las secretamente sucias y poderosas sociedades que no se atreven a unirse a nuestra ardua lucha por la libertad.
Venezuela, espero que despiertes, espero que todos lo hagamos, y que la luz al final del túnel deje de ser una simple ilusión y se vuelva una potente realidad que haga que nuestro país brille y renazca de nuevo. Un saludo a todos los venezolanos, compañeros de lucha y combatientes eternos. La oscuridad no dura para siempre, y ésta siempre tiene su final.
Más claro no pudiste haberlo dicho, es complicado el panorama nacional, y de nosotros depende el futuro de este país.