Al fin ella pronunció las palabras necesarias, esas que rompieron el silencio que guardaba, pidió que la ayudaran en un suspiro que retuvo su aliento.
¿Alguna vez escuchaste el ruido del silencio?
Por un tiempo estuvo llorando, ella tenía la cualidad de ser sincera, ella llevaba una sonrisa agradable en su maleta, allí donde colocó los sueños, ella creía en la esperanza, pensaba que su destino era encontrar un futuro y apostó la vida entera, pero se encontró con el egoísmo de frente, y con la falta de palabra.
Entonces ella lo supo debía enfrentarse a las consecuencias, ella recibió maltratos pero sonreía mientras servía los platos, aún al final ella colocaba su corazón al sazonar.
En su mente estaba preparando la huida, no podía quedarse, no podía sacrificar otra vida, porque el mundo le indicaba que no estaba sola, que debía pensar en las flores que nacen en las mañanas.
La mayoría de las personas no entenderían lo que vivió, mientras con miedo dormía vigilando una respiración cercana, una que supuestamente en algún momento era la respiración amiga.
Entonces el día llegó, ella escapó en unos minutos, no llegó a despedirse, no miraba ya con amor, las lágrimas ya se veían en sus ojos, pero lo principal era estar a salvo y no poner en peligro otra vida.
El silencio se hizo su amigo, ella decoraba su rostro con las lágrimas del olvido, pero los ángeles le hicieron fiesta en el camino.
Un día rompió el silencio para que no la lastimara más, pudo al fin gritarle a la realidad que ya era libre, que no le importaba ya aquella vanidad, no le importaba lo que nunca tuvo, porque el amor no necesita violentar el espacio mental y físico cuando es verdadero y puro.❤
Imágenes propias. Fotografías tomadas con un móvil Blu Vivo One Plus. Cámara f / 2.0 1/100 3.79mm ISO 200. Editadas para los mensajes usando la aplicación de diseños Canva.
