Obtener texto completo gratis de artículos científicos. Controversias.

in #steemstem5 years ago (edited)

Alexandra Elbakyan, de 30 años, es considerada como “La Robin Hood de la Ciencia”. En su época de estudiante cuando llegó el momento de desarrollar su tesis tenía que consultar muchos trabajos de investigación publicados y la gran mayoría requerían efectuar pago a las editoriales (dinero que no tenía), les escribía a los autores agradeciendo le enviarán sus copias personales (en muchos casos no la envían) y frecuentaba sitios web piratas en los que logró descargar algunos libros, lo que le hizo pensar que podía hacer algo similar. Empezó a indagar en comunidades piratas, quienes la orientaron como evitar las barreras de pago, y posteriormente lanzó Sci-Hub.

Los candados al acceso a la información científica que imponen las editoriales de revistas y bases de datos afectan a millones de estudiantes, académicos e investigadores en todo el mundo.

Sci-Hub es una plataforma que coloca en acceso libre y sin permiso artículos académicos publicados en revistas comercializadas por las más grandes editoriales como Reed Elsevier (RELX), Springer, Wiley-Blackwell, Sage y Taylor & Francis quienes publican la mitad de los estudios realizados en todas las universidades del mundo. Lanzó el sitio web porque considera que las costosas barreras de pago impiden la consulta a estudiantes e investigadores sin recursos.

Fuentes: RELX; Springer; Wiley; Wiley-Blackwell.; Sage; Taylor & Francis. Montaje realizado en CorelDRAW X8 por @capp.

Todo esto le ha traído consecuencias a Alexandra. La editorial en Países Bajos (holandesa) Elsevier la demandó alegando pérdidas de millones de dólares por millones de artículos protegidos por derechos de ‘copyright’ que son descargados en Sci-Hub. La demanda popularizó a Sci-Hub y esto se tradujo en mayor descarga de documentos.

Elsevier ganó el fallo legal por proporcionar acceso ilícito a decenas de millones de trabajos de investigación y libros. Un tribunal de distrito de Nueva York otorgó a Elsevier 15 millones de dólares en daños por infracción de derechos de autor por parte de Sci-Hub, el proyecto Library of Genesis y otros sitios relacionados. Al respecto, Alejandra ha manifestado que sus servidores están en Rusia y en Estados Unidos no tiene nada, de modo que no hay nada que incautarle. Alexandra Elbakyan ha enfrentado órdenes judiciales y amenazas de sitios en toda Europa.

Otro caso fue el de la corte de un distrito de Virginia, que falló a favor de la American Chemical Society (ACS) por el pago por indemnización por 4,8 millones de dólares; además, esta corte emitió un mandato amplio que permite a la empresa ACS exigir la censura del sitio Sci-Hub a los proveedores de servicios de Internet, registros de nombres de dominio y motores de búsqueda.

Destaco una información curiosa, por causa de Elsevier, un tribunal en Suecia ordenó a la empresa sueca proveedora de internet Bahnhof, con sede en Estocolmo, que bloqueara a Sci-Hub, y Bahnhof se vio obligada a bloquear 20 dominios asociados con Sci-Hub. Curiosamente, Bahnhof se refirió a Elsevier como “codiciosos oportunistas” y luego bloqueó el sitio web de Elsevier en protesta.

De manera personal recuerdo que en determinado momento el sitio web de Sci-Hub fue hackeado y no se podía ingresar, no obstante la respuesta inmediata fue la creación de muchos otros sitios web con distintos dominios y eventualmente también fueron hackeados pero la cantidad prevaleció y hoy en día se mantienen algunos, por ejemplo, sci-hub.se; sci-hub.tw y sci-hub.ren (aunque algunos usan protocolo http o no seguro como el seguro https, se puede ingresar sin problemas aceptando cuando el navegador advierta). Sci-Hub se complementa con el proyecto Library of Genesis (mencionado arriba), abreviado como LibGen, cuyo sitio web es gen.lib.rus.ec o también libgen.is en el cual se pueden descargar libros publicados por las editoriales mencionadas. Cabe destacar que las publicaciones de las dos más importantes revistas científicas del mundo Science y Nature, se pueden descargar desde Sci-Hub. Curiosamente la revista Nature incluyó a Alexandra, aunque en teoría es su enemiga, en una noticia como una de las 10 personas más importantes en la ciencia en el año 2016. La noticia se puede apreciar pulsando clic aquí.

Pero Alexandra Elbakyan y Sci-Hub no son los únicos involucrados en las situaciones planteadas con las editoriales.

De manera paralela se ha argumentado que gran parte de la investigación realizada que se publica es de financiación pública, la tipografía y el control de calidad (revisión por pares) son realizados por personas que son pagadas por el público y la compra de las revistas también es pagada por el público. A esto se suma, y es el punto de mayor interés, el alto costo para adquirir un trabajo publicado. Estos argumentos han generado negociaciones entre universidades y editoriales. Algunas aún se llevan a cabo y otras ya generaron resultados.

Entre acciones tomadas, 4 de las más importantes universidades en Berlín cancelaron sus suscripciones a las revistas académicas comercializadas por el gigante holandés (en Países Bajos) Elsevier, y posteriormente 9 universidades del estado de Baden-Württemberg. En total, casi 60 instituciones académicas alemanas que han cancelado sus suscripciones con Elsevier. Alemania carece actualmente de contrato con Elsevier, en parte porque los bibliotecarios creen que los académicos pueden acceder a documentos gratuitos a través de sitios como ResearchGate.

Aquí comentar que la red social de y para investigadores, ResearchGate, también está en la mira de las editoriales y se encuentran en negociaciones. Según he apreciado, el problema aquí no radica tanto en que la plataforma como tal publique trabajos de investigaciones publicadas en editoriales, como hace Sci-Hub, sino en que los que aparecen publicados son fundamentalmente copias para uso personal que las editoriales dan a los autores y estos las publican en la plataforma; y eso viola el documento de transferencia de derechos de autor firmado entre las editoriales y los autores del trabajo. Sin embargo, las editoriales sostienen que ResearchGate promueve que se publiquen y con relación a los autores sugiere que deberían compartir sus copias personales vía correo electrónico. Elsevier y ACS presentaron una demanda en Alemania para evitar que la red social académica ResearchGate compartiera contenidos protegidos por derechos de autor. La Coalition for Responsible Sharing, que incluye 5 empresas editoriales (ACS, Elsevier, Brill, Wiley y Wolter-Kluwer) emitió avisos de baja y ResearchGate restringió el acceso a 1,7 millones de artículos albergados en su plataforma.

Hasta la Universidad de Harvard ha admitido que ya no puede hacer frente a los precios que imponen los editores para que sus investigadores puedan acceder a los artículos.

Las negociaciones entre universidades de Países Bajos (holandesas) y la Royal Society of Chemistry (RSC) sobre el acceso en línea a sus revistas, incluida la publicación de acceso abierto, no tuvieron éxito. Ya no están suscritas a ninguna de las revistas de la RSC. Ahora ofrecen algunas alternativas para tratar de obtener el texto completo de las publicaciones, en total 12, y si las primeras 11 fallan, la número 12 es la plataforma Sci-Hub. Para ver las alternativas se puede ingresar aquí y luego darle clic en “Some alternatives”; o también ingresando aquí y luego darle clic en “special flyer”.

A la fuente se llega como se señaló en el texto. Es un documento en formato .pdf

En la última información que he recibido, de fecha 25 de julio, se hacía alusión a que la Universidad de California que incluye los campus Berkeley, Los Ángeles y Davis, entre otros, dejó de suscribirse a Elsevier porque no quiere que el conocimiento científico se encierre detrás de barreras de pago y el costo de la publicación académica se salió de control.

Finalmente, Elsevier ya posee alrededor de 3.000 revistas académicas y sus artículos representan alrededor del 18 % de toda la producción de investigación mundial. Elsevier genera miles de millones de dólares al año y es una industria privada que domina las instituciones de la ciencia; y bibliotecarios, académicos e incluso piratas están tratando de recuperar el control. Si caen las barreras de pago, el impacto será global.

“Cuando la ciencia está encerrada detrás de las paredes de pago, significa que los pacientes de cáncer no pueden acceder y leer fácilmente la investigación sobre sus condiciones. Cuando los estudiosos no pueden leer las últimas investigaciones, eso dificulta la investigación que pueden hacer y retrasa el progreso de la humanidad”. Jeffrey MacKie-Mason.

Esta entrada está basada en correos electrónicos informativos recibidos por @capp de parte de la plataforma SciELO México, del grupo de Google Boletín SciELO-México y experiencias personales e información manejada por @capp.

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Muy buena informaicón, @capp. La leeré de nuevo con más detenimiento. Saludos.

Saludos. Aprovecho tu comentario para expresar que en Sci-Hub y Library of Genesis, dependiendo de si es artículo o libro, basta con copiar el título de lo que se desea y pegarlo en la búsqueda. Otras opciones, también dependientes de si es artículo o libro, es pegar la dirección web del sitio donde se encuentra, el DOI (identificador de objeto digital, es único para un artículo o libro), ISBN (número estándar internacional del libro); hay otras opciones en mayor detalle, por ejemplo, para solo un capítulo de un libro se puede pegar el DOI de ese capítulo en Sci-HUB. En lo descrito aparecen direcciones webs de Sci-Hub y Library of Genesis.

Felicitaciones, su publicación ha sido muy valorada por la comunidad hispanohablante . Con el fin de proteger la economía del ecosistema, de momento debemos limitar tu cantidad de recompensa Spaco.

Gracias, casualmente hace bastante rato estuve revisando y la iniciativa basada en la etiqueta "spanish" es formidable.

Gracias por la valoración.

Interesante tu artículo @capp. Ciertamente las restricciones de pago limitan la propia investigación, y si las grandes universidades ya consideran excesivos los pagos por los artículos que quedara para el resto de la comunidad universitaria. Hay mucho que reflexionar al respecto. Gracias por compartir.

Es una batalla librada hace tiempo y de alguna manera el acceso abierto ha ganado mucho terreno, favoreciendo a las comunidades universitarias que son las más perjudicadas; pero no ha sido suficiente. Saludos.